Peruano califica de patraña del gobierno por pedir su extradición

Desde España, William Johny Huertas Ramírez, el primer peruano que sería extraditado al ser hallado culpable en un juicio por alimentos entablado por su esposa Janina Soriano Ríos, contó su verdad a RPP Noticias.

En enlace telefónico, Huertas afirmó que se trata de una ‘patraña’ montada por el gobierno contra su honor y el de su familia porque, desde el 2001 que abandonó legalmente el país rumbo a España, siempre envió dinero para su menor hijo.

Aseguró no ser como esos padres que se desligan de sus hijos, y que tiene documentos para demostrar que enviaba ‘religiosamente’ la pensión tanto en dinero como en vestimenta.

Señaló que mediante la agencia española ‘Charo’, enviaba desde 150 a 200 euros mensuales, incluso desde antes que un juez peruano estableciera que la pensión sería de 600 soles.

Negó haberse fugado del país, como indica la sentencia en su contra, ya que tuvo el consentimiento de su esposa Janina Soriano Ríos y de toda su familia que fue a despedirlo al aeropuerto.

El 1 de julio el gobierno oficializó el pedido de extradición a España del connacional William Johny Huertas Ramírez por no pagar la pensión alimenticia a su hijo.

Huertas Ramírez, quien vive en Madrid, se encuentra en calidad de reo ausente con mandato de ubicación y captura internacional por orden de la Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la República.

Al respecto, el peruano afirma que no estoy notificado oficialmente del expediente de extradición, y continúa haciendo sus labores normales.

Rechazó asimismo haber amenazado a Soriano tras conocerse el fallo de extradición, aunque sí reconoció que la llamó para averiguar de qué se trataba este asunto, recibiendo una negativa a responder por parte de su aún esposa.

Por su parte, Janina Soriano Ríos, quien vive en Argentina junto a su hijo, calificó de ‘cinismo’ todo lo declarado por su esposo, a quien le pidió en reiteradas ocasiones que suba la pensión porque no alcanzaba lo que enviaba.

Según dijo, Huertas ni siquiera enviaba dinero a sus padres, quienes dejaron de tener comunicación con él.

“No sé cómo puede tener el cinismo de decir tantas cosas. Yo, hasta el cansancio le dije que empezara a subir la pensión porque no alcanzaba, y me dijo que trabaje o que dejara a mi hijo en casa de sus padres”, recordó.