Completamente desnudo y con sus partes íntimas clavadas en los adoquines, el pintor Pavlenski se quedó inmóvil mirando sus testículos en una acción que calificó de metáfora de la "indiferencia política".
El pintor ruso Piotr Pavlenski fue hospitalizado este domingo después de clavar sus testículos con un martillo a los adoquines de la Plaza Roja de Moscú en una acción de protesta contra el Kremlin que el polémico artista denominó "Fijación" y que coincidió con la celebración en Rusia del Día de la Policía.
Completamente desnudo y con sus partes íntimas clavadas en los adoquines, Pavlenski se quedó inmóvil durante más de una hora mirando sus testículos en una acción que calificó de "metáfora de la apatía, indiferencia política y fatalismo de la sociedad actual rusa".
"No es la arbitrariedad de los cargos públicos lo que priva a la sociedad de su capacidad de actuar, sino la fijación en sus derrotas y pérdidas que nos clava cada vez con más fuerza a los adoquines del Kremlin, convirtiendo a las personas en estatuas que esperan resignadas a su destino", explica su acción el manifiesto de Pavlenski.
Hora y media después de iniciarse, el artista fue trasladado a un hospital de la capital rusa, aunque una fuente de las fuerzas de seguridad ya adelantó a la agencia oficialista RIA-Nóvosti que tras recibir tratamiento será detenido por la policía.
El policía calificó la acción del pintor como algo "normal para un enfermo psíquico".
Pavlenski, a su vez, cree que "la sociedad, ahora que el poder ha convertido el país en una gran cárcel, permite la arbitrariedad, y, olvidando su superioridad numérica, acerca con su inacción el triunfo de un Estado policial" en Rusia.
No es la primera vez que el artista de San Petersburgo, la segunda ciudad de Rusia, se hace daño a sí mismo para expresar su protesta contra el Gobierno del presidente ruso, Vladimir Putin.
El pasado 3 de mayo volvió a quedarse totalmente desnudo para enrollarse en alambre de espinos frente al edificio de la Asamblea Legislativa de San Petersburgo en una acción que llamó "Cuerpo" y que simbolizaba "la existencia humana en un ambiente de represión legal, cuando el más mínimo movimiento provoca una durísima reacción del sistema legislativo, que se clava en el cuerpo del individuo".
En junio del año pasado, Pavlenski se cosió la boca en una acción de apoyo al grupo femenino punk Pussy Riot, dos de cuyas integrantes están encarceladas por cantar contra Putin en el principal templo de la Iglesia Ortodoxa Rusa.
En esa ocasión, el pintor se colocó frente a una famosa catedral de San Petersburgo con un cartel que rezaba: "La acción de Pussy Riot en una escenificación de la famosa acción de Jesucristo", cuando expulsó del templo a los comerciantes.
EFE
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