La cita será a partir de este lunes en Lima para discutir el combate aéreo al narcotráfico y otras formas de luchar contra este flagelo de manera coordinada entre los países.
Diversos "zares antidrogas" de América Latina
se reunirán a partir de mañana en Lima para discutir el combate
aéreo al narcotráfico y otras formas de luchar contra este flagelo
de manera integral y coordinada entre los países.
Un total de 120 representantes de organizaciones de 40 países de la región y observadores de la Unión Europea (UE) y otros países se darán cita hasta el próximo jueves en la 20 reunión de "Jefes de Organismos Encargados de Combatir el Tráfico Ilícito de Drogas en América Latina y el Caribe (HONLEA)".
La reunión también se centrará en la financiación de las campañas electorales por mafias del narcotráfico y su relación con la corrupción y las drogas sintéticas, cuyo control aún está "en pañales", explicó el presidente ejecutivo de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), Rómulo Pizarro.
En entrevista con Efe, Pizarro consideró que el foro, auspiciado por la Organización de Naciones Unidas (ONU), intentará sumar esfuerzos de manera "integral" y evitar así que la política antidrogas de un país termine afectando negativamente a otro por el "efecto globo".
En este sentido, subrayó que el narcotráfico no tiene barreras y abogó por reforzar la vigilancia en las fronteras y la interdicción de las avionetas que transportan la droga, con ayuda de los avances tecnológicos de los países más desarrollados.
Sin embargo, reconoció Pizarro, todavía existen grandes diferencias entre los países de la región para abordar el fenómeno desde el punto de vista legislativo, aduanero y policial.
El responsable de Devida explicó que mientras los precursores químicos son ilegales en Colombia, en Perú son legales, aunque se desvían a usos ilícitos.
Asimismo, la planta de coca es legal en Perú y Bolivia, al contrario que en Colombia, pero la hoja de coca que se consume legalmente no representa ni el cinco por ciento del total de hoja cosechada, siendo el resto mayormente destinado al narcotráfico.
Pizarro aseguró que los narcotraficantes han pasado a utilizar electrodomésticos como licuadoras y microondas para ahorrar tiempo y costes en los procesos de trituración y secado de la hoja de coca, antes de procesarla en pasta básica de cocaína.
Según los últimos datos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Perú se convirtió en 2009 en el primer productor mundial de hoja de coca, con 119.000 toneladas métricas frente a las 103.000 de Colombia.
Dadas las diferencias en el sistema de medición de la hoja de coca (las autoridades colombianas miden la secada al horno y las peruanas, la secada al sol), Pizarro confió en que los países logren un acuerdo para homologar los cálculos en lo que queda de año.
Para el "zar antidroga" peruano, es "irrelevante" que Perú sea el primer o el segundo productor de coca en el mundo, ya que debe primar la forma de enfrentar el narcotráfico y los problemas que éste ocasiona en la gobernabilidad y en la economía del país, entre otros. EFE
Un total de 120 representantes de organizaciones de 40 países de la región y observadores de la Unión Europea (UE) y otros países se darán cita hasta el próximo jueves en la 20 reunión de "Jefes de Organismos Encargados de Combatir el Tráfico Ilícito de Drogas en América Latina y el Caribe (HONLEA)".
La reunión también se centrará en la financiación de las campañas electorales por mafias del narcotráfico y su relación con la corrupción y las drogas sintéticas, cuyo control aún está "en pañales", explicó el presidente ejecutivo de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), Rómulo Pizarro.
En entrevista con Efe, Pizarro consideró que el foro, auspiciado por la Organización de Naciones Unidas (ONU), intentará sumar esfuerzos de manera "integral" y evitar así que la política antidrogas de un país termine afectando negativamente a otro por el "efecto globo".
En este sentido, subrayó que el narcotráfico no tiene barreras y abogó por reforzar la vigilancia en las fronteras y la interdicción de las avionetas que transportan la droga, con ayuda de los avances tecnológicos de los países más desarrollados.
Sin embargo, reconoció Pizarro, todavía existen grandes diferencias entre los países de la región para abordar el fenómeno desde el punto de vista legislativo, aduanero y policial.
El responsable de Devida explicó que mientras los precursores químicos son ilegales en Colombia, en Perú son legales, aunque se desvían a usos ilícitos.
Asimismo, la planta de coca es legal en Perú y Bolivia, al contrario que en Colombia, pero la hoja de coca que se consume legalmente no representa ni el cinco por ciento del total de hoja cosechada, siendo el resto mayormente destinado al narcotráfico.
Pizarro aseguró que los narcotraficantes han pasado a utilizar electrodomésticos como licuadoras y microondas para ahorrar tiempo y costes en los procesos de trituración y secado de la hoja de coca, antes de procesarla en pasta básica de cocaína.
Según los últimos datos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Perú se convirtió en 2009 en el primer productor mundial de hoja de coca, con 119.000 toneladas métricas frente a las 103.000 de Colombia.
Dadas las diferencias en el sistema de medición de la hoja de coca (las autoridades colombianas miden la secada al horno y las peruanas, la secada al sol), Pizarro confió en que los países logren un acuerdo para homologar los cálculos en lo que queda de año.
Para el "zar antidroga" peruano, es "irrelevante" que Perú sea el primer o el segundo productor de coca en el mundo, ya que debe primar la forma de enfrentar el narcotráfico y los problemas que éste ocasiona en la gobernabilidad y en la economía del país, entre otros. EFE
Comparte esta noticia