Antes de jugar contra el ucraniano Dolgopolov, el tenista se enteró de la muerte de su abuelo. Pese a ello jugó y ganó.
El tenista serbio Novak Djokovic consiguió este jueves su pase a cuartos de final del Masters 1.000 de Montecarlo, al derrotar al ucraniano Alexandr Dolgopolov por 2-6, 6-1 y 6-4, en un partido muy especial para él, al disputarlo después de conocer el fallecimiento de su abuelo.
Solo unas horas antes del comienzo del partido, cuando calentaba en una pista del Montecarlo Country Club, Djokovic era informado de la muerte de su abuelo. Dio por terminado el entrenamiento entre lágrimas.
A pesar del dolor y la tristeza por la noticia, eran pocos, más bien sólo aquellos que no conocen al serbio, los que pensaron que el torneo se quedaba sin el número uno del mundo, ante su deseo de volver a su país.
Pero no. Djokovic tenía claro que el mejor homenaje a su abuelo era una victoria.
SOBRE EL PARTIDO
No obstante una cosa es lo que el corazón de Djokovic quería y otra la reacción de su mente ante la pérdida de alguien tan querido. Eso fue lo que pasó en el primer set.
El serbio quería demostrar su tenis, acabar rápido y refugiarse en los suyos. Y así parecía que ocurriría cuando ganó el primer juego con su servicio.
A partir de ahí Dolgopolov supo aprovechar las limitaciones del rival, que por momentos parecía ausente de la pista. Tres juegos consecutivos del ucraniano (3-1) no hicieron otra cosa que agrandar la brecha en el estado anímico del serbio.
Djokovic lo intentó, se puso 3-2 y con dos bolas para recuperar el saque pero seguía fuera del partido y acabó perdiendo el set por 6-2 tras 27 minutos.
Ante un público incrédulo por el devenir del duelo, el serbio enfrió su mente y comenzó a jugar. La consecuencia fue un claro 6-1 en el segundo parcial en poco más de treinta minutos.
Al poco de empezar la tercera manga (1-1) se tuvo que interrumpir debido a la lluvia por algo más de treinta minutos. Este parón no detuvo al serbio, ahora sí muy concentrado y metido en el partido.
Dolgopolov no se amedrentó y esto posibilitó ver los mejores momentos de tenis. Cada jugador mantuvo su servicio hasta el 4-4, en el que el ucraniano con su saque quiso hacer honor a los que le critican por su irregularidad. Encadenó varios errores que aprovechó el número uno para situarse a un juego de la victoria.
Djokovic ganó su saque y por tanto el partido. Se agachó y miró primero al suelo y luego ya con lágrimas su mirada se dirigió al cielo en recuerdo a su abuelo.
EFE
Comparte esta noticia