Ante la proliferación de ómicron en Alemania, se esperan medidas específicas para esta nueva variante de la COVID-19.
El gobierno y las autoridades sanitarias de Alemania debaten esta semana la posibilidad de acortar la cuarentena para los vacunados que hayan tenido contacto con la variante ómicron, en particular para los que trabajan en sectores esenciales como la sanidad.
El ministro de Sanidad, Karl Lauterbach, confirmó este lunes a la cadena pública ZDF que está previsto reformar la normativa actual sobre periodos de cuarentena y aislamiento debido a la elevada incidencia de la variante ómicron, aunque la implementación de la medida corresponde en última instancia a los "Länder".
El paso debe estar bien preparado para no caer en contradicciones ni correr riesgos, afirmó, sin entrar en más detalles.
Aún en debate
En la actualidad en Alemania no es obligatorio guardar cuarentena tras haber tenido contacto con un positivo en caso de estar vacunado con la pauta completa o de haber superado la enfermedad, aunque algunos estados federados sí aplican la medida.
Por el contrario, quien haya tenido contacto con la variante ómicron, la más reciente y contagiosa hasta la fecha, sí que debe aislarse durante 14 días, según las recomendaciones del Instituto de virología Robert Koch (RKI).
Debido a la rápida expansión de la mutación, de la que se espera que pronto predomine en Alemania, la comisión de expertos que asesora al gobierno advirtió antes del periodo festivo de un posible colapso de los servicios esenciales si se disparaba el número de contagios.
A más tardar, está previsto que la decisión sobre la duración de la cuarentena sea anunciada este viernes, día en que el gobierno central se reunirá con los líderes regionales para evaluar la situación epidémica a la luz de los nuevos datos recabados tras el parón navideño.
No obstante, según adelantó un portavoz del Ministerio de Sanidad, el factor determinante para la decisión será la recomendación al respecto del RKI, que se espera sea emitida a lo largo de esta semana.
"El debate ahora mismo se refiere a la infraestructura crítica, si se da el caso de llegar a una situación límite puede ser necesario ajustar las reglas de cuarentena e introducir medidas adicionales," dijo el portavoz, Andreas Deffner, durante una rueda de prensa en Berlín.
Con ello, dio a entender que el Ministerio de Sanidad sólo plantea acortar la cuarentena en circunstancias muy específicas y en caso de que los servicios esenciales se vean en riesgo.
La alcaldesa-gobernadora de Berlín, Franziska Giffey, se manifestó este lunes a favor de mantener la regulación actual y afirmó, en declaraciones a la emisora Deutschlandfunk, que "todavía no es necesario" acortar la cuarentena ya que los servicios esenciales como policía y bomberos siguen operativos.
Por el contrario, el ministro de Sanidad del estado federado de Baviera (sur), Klaus Holetschek, propuso que la obligación de guardar cuarentena fuera eliminada por completo para aquellos ciudadanos que hayan obtenido ya la dosis de refuerzo.
La incidencia acumulada a siete días subió este lunes por quinto día consecutivo hasta situarse en Alemania en 232,4 nuevas infecciones por cada 100.000 habitantes, aunque el Ministerio de Sanidad parte de que la cifra real es mucho más elevada ya que debido a los días festivos los datos no están actualizados.
Con información de EFE
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