La presidenta chilena, Michelle Bachelet, confirmó cinco tres casos de la gripe A en su país, con lo que ya suman diez las personas afectadas por esa enfermedad. Cerraron cinco colegios en Santiago.
La presidenta chilena, Michelle Bachelet, confirmó cinco nuevos casos de la gripe A en su país, con lo que ya suman diez las personas afectadas por esa enfermedad, que obligó a cerrar cinco colegios en la capital.
Los casos corresponden a tres mujeres que llegaron el fin de semana desde República Dominicana y a seis personas que al parecer han tenido contacto con un niño de seis años, que es el primer menor contagiado en el país.
Los afectados confirmados hoy son una mujer de 45 años y sus dos hijos, de 11 y 8 años, así como otros dos menores, todos ellos amigos o compañeros del primer infectado, que estudiaba en el colegio San Nicolás de Myra, en Santiago.
Además, otro escolar de ocho años está infectado y hay otro caso en estudio, según adelantó Bachelet, quien recalcó que todos los afectados "se encuentran en buenas condiciones y recibiendo tratamiento antiviral".
"Estamos en la fase donde tenemos brotes comunitarios", dijo la presidenta, y añadió que el país se enfrenta a un "hecho histórico" y está preparado "para asumir que el número de casos puede aumentar".
Desde que comenzó la alerta por esta gripe, de los 191 casos sospechosos que se han estudiado en todo el país, 131 han sido descartados, 38 no correspondieron a la definición de la enfermedad y 17 aún están a la espera de los resultados.
"Hemos actuado de forma responsable, anticipada, coordinada, informando en todo momento a la población de las acciones emprendidas y de las medidas de prevención (...), que son las mismas que las de cualquier gripe estacional", recordó Bachelet.
La mandataria, tras visitar el Instituto de Salud Pública, hizo un llamamiento para que los ciudadanos adopten medidas de precaución, tanto para no contagiarse como para no propagar de forma involuntaria este virus.
Además, descartó por el momento, adelantar las vacaciones de invierno y cerrar todos los colegios.
Sin embargo, cinco de ellos, todos en la capital chilena, cerraron temporalmente sus puertas para evitar nuevos contagios, bien porque cuentan entre sus alumnos con algún infectado, o porque estos han podido tener contacto con los escolares afectados.
Según Bachelet, Chile mantiene un estricto control de los viajeros procedentes de zonas afectadas en puertos, aeropuertos y vías terrestres, y unas 34.000 personas han pasado ya por el escáner de fiebre instalado en el aeropuerto internacional de Santiago.
EFE
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