El constructor de automóviles estadounidense reducirá su producción a 100.000 unidades y eliminará 3.000 puestos de trabajo (Foto: EFE).
Chrysler solicitó 5.000 millones de dólares de ayuda a Washington, 2.000 millones más que la cantidad inicial, en el plan de reestructuración presentado hoy al Departamento del Tesoro de EE.UU., y que incluye el recorte de 3.000 puestos de trabajo.
La empresa justificó dicha solicitud basándose en el argumento de que "ha habido un declive sin precedentes en el sector del automóvil", según un comunicado.
"Ahora estamos proyectando unas ventas anuales de 10,1 millones de unidades (el punto más bajo en 40 años) y unas ventas medias anuales de 10,8 unidades del 2009 al 2012. Para Chrysler esto representa una declive de ventas de aproximadamente 720.000 unidades (una media de 180.000 unidades al año)", añadió la empresa.
Chrysler dijo que estas cifras suponen que ingresará 18.000 millones de dólares menos de lo previsto y 3.600 millones de entrada de efectivo durante los cuatro años.
La empresa indicó que el plan de reestructuración incluye la reducción en 700 millones de dólares de costes fijos y un turno de trabajo de producción, la eliminación de 3.000 puestos de trabajo y de tres modelos de vehículos.
Además Chrysler reducirá su producción en 100.000 unidades y venderá activos por valor de 300 millones de dólares.
La empresa ha suspendido las contribuciones que hacía a los fondos de pensión de sus ejecutivos, los bonos de incentivos y ha eliminado las prestaciones de los seguros de vida de sus jubilados.
El fabricante aseguró que "ha iniciado el diálogo con sus proveedores y cree que será capaz de obtener sustanciales reducciones de costes" y que espera que los tenedores de deuda subordinada acordarán reconvertirla en acciones.
En total, la empresa espera reducir su deuda en 5.000 millones de dólares.
Comparte esta noticia