El también ministro holandés de Finanzas, Jeroen Dijsselbloem, recordó el amplio apoyo que recibió el nuevo programa de asistencia financiera y de reformas por parte del Parlamento heleno el pasado día 14.
El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, afirmó que es "crucial" que Grecia mantenga ahora su compromiso con la eurozona tras la dimisión del primer ministro griego, Alexis Tsipras, y su propuesta de convocar elecciones en el país justo tras la firma del tercer rescate.
"Tomo nota del anuncio del primer ministro Tsipras esta noche sobre unas elecciones en Grecia", declaró Dijsselbloem, quien consideró "crucial que Grecia mantenga su compromiso con la eurozona" tras el anuncio del líder del partido izquierdista Syriza.
El también ministro holandés de Finanzas recordó el amplio apoyo que recibió el nuevo programa de asistencia financiera y de reformas por parte del Parlamento heleno el pasado día 14, y manifestó su deseo de que las elecciones "conduzcan a un respaldo incluso mayor en el nuevo" hemiciclo griego.
"Espero que estas elecciones tengan lugar relativamente pronto, de manera que Grecia pueda emprender importantes pasos en octubre, como estaba previsto" en el memorando de entendimiento que recoge los ajustes y las reformas que debe llevar a cabo Atenas a cambio de recibir nuevos créditos de hasta 86.000 millones de euros hasta 2018 y que ha sido firmado en las últimas horas, agregó Dijsselbloem.
En otoño no solo se hará la primera revisión del rescate griego, sino también se abordará la cuestión de la sostenibilidad de la deuda griega y con ella las medidas que están dispuestos a tomar los socios de la eurozona para aliviar la deuda helena.
El alivio de la deuda griega es una precondición para la participación del Fondo Monetario Internacional en el tercer rescate, una decisión que se tomará precisamente en octubre.
Tsipras ha renunciado a su cargo el mismo día en que Atenas recibió del fondo de rescate de la eurozona un primer pago de 13.000 millones de euros de un tramo inicial total de 26.000 millones para devolver al Banco Central Europeo 3.400 millones de euros, reembolsar el crédito puente de 7.160 millones que recibió en julio de la Unión Europea y saldar facturas atrasadas.
EFE
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