"No quiero pecar de exceso de optimismo", dijo el secretario general de la OEA tras señalar que de producirse un consenso definitivo su institución supervisaría las próximas elecciones.
El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, expresó su satisfacción por los avances registrados en el diálogo que se lleva a cabo en Honduras, tras afirmar que hay esperanza de una solución.
En una sesión ordinaria del Consejo Permanente, en el que presentó su informe sobre la reciente misión de alto nivel de la OEA a Honduras, Insulza rehusó pronunciarse con más claridad sobre los avances en el diálogo en Honduras.
Hoy, las comisiones que representan al Gobierno de facto que preside Roberto Micheletti y al mandatario depuesto, Manuel Zelaya, no lograron llegar a un acuerdo para la restitución del derrocado gobernante, aunque se avanzó en el diálogo sobre ese punto.
"El diálogo sobre este punto ha sido cordial y ambas partes hemos alcanzado importantes avances. Sin embargo, hasta este momento no hay ningún acuerdo final en torno a este punto", subraya un comunicado de la comisión que representa a Micheletti difundido por la Casa Presidencial.
Pese a ello, Insulza quiso expresar su "satisfacción por el avance que ha tenido hasta ahora" la mesa de diálogo instalada el pasado miércoles cuando la misión de alto nivel de la Organización de Estados Americanos (OEA) visitó Honduras.
"Creo que ha habido buenos avances que nos permiten sostener esperanzas de que haya una solución hondureña para una crisis hondureña", señaló el máximo responsable del organismo regional.
"No quiero pecar de exceso de optimismo. Esto no está terminado hasta que esté terminado", subrayó, advirtiendo así de que ambas partes aún deben dar su visto bueno al texto y suscribirlo.
Recordó que las partes todavía tienen que acordar aspectos como la entrada en vigor del acuerdo, establecer fechas y redactar el documento definitivo.
Pero "los acuerdos sustantivos están adoptados", dijo.
Insulza indicó que de producirse un consenso definitivo, a la OEA le correspondería "examinar" el envío de una misión de observadores a Honduras para que acompañe y supervise las elecciones presidenciales del próximo 29 de noviembre.
Adelantó que la comisión de la verdad que se crearía en virtud del acuerdo, se constituiría en el primer semestre de 2010.
Además, sería necesario convocar una nueva Asamblea General para que la OEA pueda levantar la suspensión impuesta a Honduras por el golpe de Estado del 28 de junio que derrocó a Manuel Zelaya.
EFE
En una sesión ordinaria del Consejo Permanente, en el que presentó su informe sobre la reciente misión de alto nivel de la OEA a Honduras, Insulza rehusó pronunciarse con más claridad sobre los avances en el diálogo en Honduras.
Hoy, las comisiones que representan al Gobierno de facto que preside Roberto Micheletti y al mandatario depuesto, Manuel Zelaya, no lograron llegar a un acuerdo para la restitución del derrocado gobernante, aunque se avanzó en el diálogo sobre ese punto.
"El diálogo sobre este punto ha sido cordial y ambas partes hemos alcanzado importantes avances. Sin embargo, hasta este momento no hay ningún acuerdo final en torno a este punto", subraya un comunicado de la comisión que representa a Micheletti difundido por la Casa Presidencial.
Pese a ello, Insulza quiso expresar su "satisfacción por el avance que ha tenido hasta ahora" la mesa de diálogo instalada el pasado miércoles cuando la misión de alto nivel de la Organización de Estados Americanos (OEA) visitó Honduras.
"Creo que ha habido buenos avances que nos permiten sostener esperanzas de que haya una solución hondureña para una crisis hondureña", señaló el máximo responsable del organismo regional.
"No quiero pecar de exceso de optimismo. Esto no está terminado hasta que esté terminado", subrayó, advirtiendo así de que ambas partes aún deben dar su visto bueno al texto y suscribirlo.
Recordó que las partes todavía tienen que acordar aspectos como la entrada en vigor del acuerdo, establecer fechas y redactar el documento definitivo.
Pero "los acuerdos sustantivos están adoptados", dijo.
Insulza indicó que de producirse un consenso definitivo, a la OEA le correspondería "examinar" el envío de una misión de observadores a Honduras para que acompañe y supervise las elecciones presidenciales del próximo 29 de noviembre.
Adelantó que la comisión de la verdad que se crearía en virtud del acuerdo, se constituiría en el primer semestre de 2010.
Además, sería necesario convocar una nueva Asamblea General para que la OEA pueda levantar la suspensión impuesta a Honduras por el golpe de Estado del 28 de junio que derrocó a Manuel Zelaya.
EFE
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