Consideran que ha habido "evidentes violaciones" a la ley, ya que afirman que no se pueden realizar escuchas telefónicas a diputados y senadores sin autorización previa del Parlamento.
El partido de Silvio Berlusconi pide al ministro de Justicia de Italia, Angelino Alfano, que valore la posibilidad de emprender medidas disciplinarias contra la Fiscalía del caso Ruby, que ha investigado al primer ministro por un supuesto abuso de poder e incitación a la prostitución de menores.
Así lo refleja el contenido de una pregunta parlamentaria a Alfano presentada hoy en el Senado por los dos máximos exponentes del partido de Berlusconi, el Pueblo de la Libertad (PDL), en la Cámara Alta, Maurizio Gasparri y Gaetano Quagliarello.
Los senadores del PDL piden al titular de Justicia que "valore la oportunidad de emprender iniciativas de inspección y disciplinarias de propia competencia" para comprobar la corrección en la actuación de la Fiscalía de Milán en la investigación del caso Ruby, cuyo juicio proseguirá el próximo 31 de mayo.
El partido de Berlusconi considera que ha habido "evidentes violaciones" del artículo 68 de la Constitución italiana, que afirma que no se pueden llevar a cabo escuchas telefónicas a los diputados y senadores sin autorización previa del Parlamento.
La petición de medidas contra la Fiscalía llega después de que el pasado 5 de abril, un día antes de que comenzara el juicio Ruby, el diario milanés "Corriere della Sera" publicara parte del contenido de tres escuchas telefónicas realizadas durante la investigación y en las que se oye la voz de Berlusconi.
Por esta cuestión, la Fiscalía General del Tribunal Supremo abrió una investigación y el fiscal jefe de Milán, Edmondo Bruti Liberati, tuvo que comparecer ante los medios para explicar el hecho de que esas escuchas, realizadas a las interlocutoras de Berlusconi y en las que se escucha al mandatario, se incluyeran en el sumario y posteriormente fueran filtradas a la prensa.
Las filtraciones en cuestión corresponden a sendas conversaciones telefónicas de Berlusconi en agosto, septiembre y octubre de 2010 con la consejera regional de Lombardía, Nicole Minetti (una de las investigadas en la otra rama del caso Ruby), y con dos de las jóvenes que acudieron a sus fiestas, la dominicana Marysthelle Polanco y la rusa Raissa Skorkina.
En una de ellas, Berlusconi dice que lo importante del asunto es que "haya varias personas" que declaren que Ruby, la joven marroquí que pudo mantener relaciones sexuales con él a cambio de dinero, le había dicho que tenía más edad de la que en realidad tenía y que, de todos modos, él y su entorno no habían hecho "nada de malo".
Además se puede oír a Berlusconi extrañarse de que Ruby hubiera denunciado a Polanco por supuesta inducción a la prostitución: "¿Así que ella misma se da el carné de puta?", dijo el primer ministro.
El diario milanés "Corriere della Sera" asegura hoy que hay más chicas que pudieron participar en las fiestas de Berlusconi que están dispuestas a ofrecer su testimonio, más allá del escandaloso relato de dos chicas de 18 años que recogía el pasado miércoles la prensa italiana.
En un comunicado divulgado hoy, la Fiscalía de Milán informa de que han aparecido carteles pegados en los espacios electorales de la ciudad, en los que se dice "Fuera las Brigadas Rojas de las fiscalías", en referencia al grupo terrorista italiano. EFE
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