Restos de animales han sido ya sepultados y la industria turística no tiene nada que temer. Autoridades afirman que han logrado contener el brote epidémico.
Al menos 30 hipopótamos han muerto de ántrax en el Parque Nacional Queen Elizabeth, una reserva de la vida natural en el oeste de Uganda, pero las autoridades locales afirman que han logrado contener el brote epidémico.
Según Lillian Nsubuga, funcionaria de comunicaciones de la Autoridad Ugandesa de Vida Salvaje, que supervisa todas las actividades en las reservas naturales del país, todos los hipopótamos muertos fueron sepultados en el parque tras ser examinados por veterinarios y médicos del sector de Salud Pública.
El virulento brote de ántrax causó la muerte de entre 10 y 15 de estos paquidermos.
Esta es la segunda epidemia de ántrax que se registra en el Parque Nacional Queen Elizabeth, donde un brote similar en 2004 dejó un saldo de 300 hipopótamos muertos.
"En esta ocasión no hemos tenido muchos problemas porque sabíamos de que enfermedad se trataba, a diferencia con el brote de hace seis años, cuando no teníamos idea de lo que afrontábamos", señaló Nsubuga.
Los operadores de la industria turística ugandesa han expresado temores de que el brote de ántrax pueda afectar negativamente sus negocios al mantener alejados a los visitantes del país ya que la bacteria que lo causa puede infectar también a los humanos.
Nsubuga puntualizó, no obstante, que los restos de todos los animales muertos de ántrax han sido ya sepultados y que la industria turística no tiene nada que temer.
Esta es la temporada alta para los turistas que llegan a Uganda desde Europa, Estados Unidos y otras regiones del mundo.
"Esta es la temporada alta para todos nuestros destinos turísticos y, hasta el momento, no hemos tenido ningún efecto negativo", recalcó Nsubuga, quien subrayó que el Parque Nacional Queen Elizabeth, el de las Cataratas Murchison, así como el Impenetrable de Bwindi (famoso por sus gorilas de montaña) y el del Bosque de Kibale "han recibido ya muchísimos visitantes".
La reserva, bautizada con ese nombre en honor de la Reina Isabel II de Inglaterra, fue una de las escalas del Príncipe Carlos en noviembre de 2007, cuando acompañó a su madre a la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del Commonwealth celebrada en Kampala.
EFE
Según Lillian Nsubuga, funcionaria de comunicaciones de la Autoridad Ugandesa de Vida Salvaje, que supervisa todas las actividades en las reservas naturales del país, todos los hipopótamos muertos fueron sepultados en el parque tras ser examinados por veterinarios y médicos del sector de Salud Pública.
El virulento brote de ántrax causó la muerte de entre 10 y 15 de estos paquidermos.
Esta es la segunda epidemia de ántrax que se registra en el Parque Nacional Queen Elizabeth, donde un brote similar en 2004 dejó un saldo de 300 hipopótamos muertos.
"En esta ocasión no hemos tenido muchos problemas porque sabíamos de que enfermedad se trataba, a diferencia con el brote de hace seis años, cuando no teníamos idea de lo que afrontábamos", señaló Nsubuga.
Los operadores de la industria turística ugandesa han expresado temores de que el brote de ántrax pueda afectar negativamente sus negocios al mantener alejados a los visitantes del país ya que la bacteria que lo causa puede infectar también a los humanos.
Nsubuga puntualizó, no obstante, que los restos de todos los animales muertos de ántrax han sido ya sepultados y que la industria turística no tiene nada que temer.
Esta es la temporada alta para los turistas que llegan a Uganda desde Europa, Estados Unidos y otras regiones del mundo.
"Esta es la temporada alta para todos nuestros destinos turísticos y, hasta el momento, no hemos tenido ningún efecto negativo", recalcó Nsubuga, quien subrayó que el Parque Nacional Queen Elizabeth, el de las Cataratas Murchison, así como el Impenetrable de Bwindi (famoso por sus gorilas de montaña) y el del Bosque de Kibale "han recibido ya muchísimos visitantes".
La reserva, bautizada con ese nombre en honor de la Reina Isabel II de Inglaterra, fue una de las escalas del Príncipe Carlos en noviembre de 2007, cuando acompañó a su madre a la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del Commonwealth celebrada en Kampala.
EFE
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