Frente a ello, el presidente colombiano reiteró su oferta a los rebeldes para que entreguen voluntariamente a los secuestrados.
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, dijo a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que tienen dos caminos: desmovilizarse y reinsertarse tras entregar a los secuestrados o afrontar operaciones militares como la de este domingo que rescató a cuatro rehenes.
En una alocución en la Casa de Nariño (sede del Ejecutivo), que fue televisada en directo, Uribe se presentó junto a los cuatro liberados, el general Luis Mendieta, los coroneles Enrique Murillo y William Donato, y el sargento Arbey Delgado.
Ante ellos, el presidente reiteró su oferta a los guerrilleros para que entreguen voluntariamente a los secuestrados, horas después de recordar desde la ciudad de Manizales que los reinsertados recibirían recompensas y podrían iniciar una nueva vida en libertad.
"Aquellos integrantes de la narcoguerrilla que tienen en sus manos a estos compatriotas les invitamos a que abandonen el grupo terrorista, a que se desmovilicen, a que regresen a la libertad a estos compatriotas secuestrados. El Gobierno les cumplirá buscando con las autoridades de la Fiscalía y la Justicia un instrumento que les permita estar libres", dijo Uribe.
Reiteró que se les ayudará "para que puedan rehacer sus vidas" porque los integrantes de las FARC, matizó, sólo tienen dos caminos a seguir.
"Este Gobierno no es un Gobierno de alardes, es un Gobierno de firmeza, sin dobleces, y lo digo, un camino es que se desmovilicen, que liberen a los secuestrados", señaló y agregó que "el otro camino es el de la persistencia en el profesionalismo de estas Fuerzas Armadas para rescatarlos (a los rehenes)".
Uribe insistió en que su Gobierno tiene "una mezcla entre urgencia y paciencia", al matizar que esa paciencia les sirve "para esperar el momento de la victoria".
Y, según el mandatario, "este es el camino de la autoridad. El primero es el camino de la rectificación y el camino de la reconciliación".
"Nosotros quisiéramos que los guerrilleros tomaran la decisión de desplazarse por el camino de la rectificación y la reconciliación, desmovilizándose y poniendo en libertad a los rehenes, a los cautivos, a los secuestrados, a los torturados; pero no vamos a renunciar al camino de la autoridad", reiteró.
Uribe dejó claro que se seguirá "hasta el último día con todo el afán de patria buscando la libertad de quienes siguen torturados en el secuestro".
El presidente de Colombia se presentó así ante la nación después de que quedara latente el éxito de la "Operación Camaleón", por la que se liberaron a cuatro secuestrados sanos y salvos, sin pérdida de vidas humanas, en un operativo perfecto y limpio, según los propios liberados y la cúpula militar y policial del país.
Este operativo se da a una semana de la segunda vuelta presidencial, a la que concurre el representante del oficialismo y ex ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, artífice de la operación militar que liberó en 2008 a quince secuestrados, entre ellos a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt.
El continuador de las políticas de Uribe se enfrentará en las urnas al aspirante del Partido Verde, Antanas Mockus.
Las encuestas de intención de voto otorgan la victoria a Santos, quien sería así el sucesor de Uribe en la Jefatura del Estado colombiano.
EFE
En una alocución en la Casa de Nariño (sede del Ejecutivo), que fue televisada en directo, Uribe se presentó junto a los cuatro liberados, el general Luis Mendieta, los coroneles Enrique Murillo y William Donato, y el sargento Arbey Delgado.
Ante ellos, el presidente reiteró su oferta a los guerrilleros para que entreguen voluntariamente a los secuestrados, horas después de recordar desde la ciudad de Manizales que los reinsertados recibirían recompensas y podrían iniciar una nueva vida en libertad.
"Aquellos integrantes de la narcoguerrilla que tienen en sus manos a estos compatriotas les invitamos a que abandonen el grupo terrorista, a que se desmovilicen, a que regresen a la libertad a estos compatriotas secuestrados. El Gobierno les cumplirá buscando con las autoridades de la Fiscalía y la Justicia un instrumento que les permita estar libres", dijo Uribe.
Reiteró que se les ayudará "para que puedan rehacer sus vidas" porque los integrantes de las FARC, matizó, sólo tienen dos caminos a seguir.
"Este Gobierno no es un Gobierno de alardes, es un Gobierno de firmeza, sin dobleces, y lo digo, un camino es que se desmovilicen, que liberen a los secuestrados", señaló y agregó que "el otro camino es el de la persistencia en el profesionalismo de estas Fuerzas Armadas para rescatarlos (a los rehenes)".
Uribe insistió en que su Gobierno tiene "una mezcla entre urgencia y paciencia", al matizar que esa paciencia les sirve "para esperar el momento de la victoria".
Y, según el mandatario, "este es el camino de la autoridad. El primero es el camino de la rectificación y el camino de la reconciliación".
"Nosotros quisiéramos que los guerrilleros tomaran la decisión de desplazarse por el camino de la rectificación y la reconciliación, desmovilizándose y poniendo en libertad a los rehenes, a los cautivos, a los secuestrados, a los torturados; pero no vamos a renunciar al camino de la autoridad", reiteró.
Uribe dejó claro que se seguirá "hasta el último día con todo el afán de patria buscando la libertad de quienes siguen torturados en el secuestro".
El presidente de Colombia se presentó así ante la nación después de que quedara latente el éxito de la "Operación Camaleón", por la que se liberaron a cuatro secuestrados sanos y salvos, sin pérdida de vidas humanas, en un operativo perfecto y limpio, según los propios liberados y la cúpula militar y policial del país.
Este operativo se da a una semana de la segunda vuelta presidencial, a la que concurre el representante del oficialismo y ex ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, artífice de la operación militar que liberó en 2008 a quince secuestrados, entre ellos a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt.
El continuador de las políticas de Uribe se enfrentará en las urnas al aspirante del Partido Verde, Antanas Mockus.
Las encuestas de intención de voto otorgan la victoria a Santos, quien sería así el sucesor de Uribe en la Jefatura del Estado colombiano.
EFE
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