Los soldados pertenecían a un grupo de fuerzas especiales que brindaba apoyo contra el terrorismo a las fuerzas locales.
Al menos cuatro soldados de las fuerzas especiales de Estados Unidos fallecieron tras una emboscada a una patrulla de seguridad en la zona de Ouallam al norte de Niamey en Níger.
De acuerdo a información de Reuters, el ataque se produjo el día miércoles y entonces el Pentágono confirmó el fallecimiento de solo tres soldados estadounidenses, mientras que otros dos fueron derivados a un centro médico. Sin embargo, este viernes los oficiales destacados en el país africano anunciaron que las fuerzas nigerinas encontraron el cuerpo de otro soldado cerca del lugar de la emboscada tras una larga labor de búsqueda.
Identidad y medidas. El Pentágono anunció que los tres primeros militares fallecidos son los sargentos Bryan Black, Jeremiah Johnson y Dustin Wright, quienes pertenecían al tercer grupo de las Fuerzas Especiales, con base en Fort Bragg. En tanto, la identidad del cuarto soldado caído no ha sido revelada.
De momento, ningún grupo se ha adjudicado la autoría del ataque y si bien los oficiales creen que una facción local del Estado Islámico es responsable, hasta el momento no han realizado acusaciones. “Estamos totalmente comprometidos con nuestros esfuerzos para atrapar a quienes atacaron a esta patrulla de fuerzas estadounidenses y nigerinas”, dijo el coronel, Mark Cheadle, portavoz del Comando Africano del Ejército estadounidense.
Reacción. El grupo de países G5 del Sahel, conformado por Mauritania, Mali, Burkina, Níger y Chad, expresó su indignación debido a que así se confirma que su región está amenazada constantemente por la amenaza terrorista.
Es por eso que pidieron mayor apoyo internacional y a sus socios regionales para poner en marcha un grupo de fuerzas militares conjuntas del grupo G5 del Sahel que se encargue de contrarrestar a los terroristas.
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