Omar Alvarado se ahorcó con su ropa en su celda y fue encontrado muerto por lo guardias.
Omar Alvarado, principal sospechoso de haber violado a una mujer y asesinado a su pequeño de cuatro años, se suicidó al interior de su celda ahorcándose con su propia ropa. El sujeto estaba preso en Caleta Olivia, Puerto Deseado (Argentina), en donde fue encontrado sin vida por los guardias que hacían la rutina diaria de medidas preventivas por la pandemia del nuevo coronavirus.
Alvarado, de 33 años, padecía de esquizofrenia y era el principal imputado de haber violado a María Zubelza, en un caso que conmocionó a toda Argentina por la brutalidad del crimen, y luego de haber asesinado a su hijo en complicidad de un menor, luego de que el pequeño presenciara el acto de violación.
Puerto Deseado, la ciudad de Santa Cruz en la que ocurrió el abuso sexual, albergaba a uno de los hijos de la mujer, a quien ella había ido a visitar. La tarde del 21 de febrero decidió salir a pasear por la zona conocida como Playa Cavendish, ubicada a 2 kilómetros del centro de la ciudad, sin imaginar que, tras ser abusada y golpeada, su hijo sería apedreado y arrojado de un precipicio por los dos implicados en el crimen.
La mujer logró arrastrarse hasta una pista cercana, en donde una pareja la encontró con una profunda herida en la cabeza y le brindó ayuda. La Policía argentina detuvo rápidamente a los dos implicados, quienes confesaron del los autores del hecho.
El juez ordenó el traslado de Alvarado a la ciudad de Caleta Olivia y al menor a Río Gallegos, pero los ciudadanos protestaron porque no querían que esté alojado en la ciudad. Fue entonces que la justicia optó por trasladarlo a un instituto de la Ciudad de Buenos Aires. Actualmente, María viene recibiendo ayuda psicológica, y todavía se recupera de las heridas en un hospital local.
Comparte esta noticia