La niña se precipitó por un pozo situado en el estado de Madhya Pradesh, tras lo que las autoridades de la India organizaron las operaciones de rescate.
Las autoridades de la India trabajan contra reloj este miércoles para rescatar a una niña de dos años que lleva más de 25 horas atrapada en un pozo de unos 100 metros de profundidad en el centro del país, y que no da señales de vida.
La niña se precipitó ayer por el pozo situado en el distrito de Sehore, en el estado de Madhya Pradesh, tras lo que las autoridades desplegaron varios equipos de rescate y maquinaria pesada para excavar un túnel hasta el lugar donde se encuentra atrapada la menor, según informó a EFE el director ejecutivo del distrito, Ashish Tiwari.
"Tenemos muchas maquinas allí pero estamos teniendo dificultades para excavar por las rocas", detalló.
El funcionario agregó que no están recibiendo actualmente respuesta de la niña.
Se deslizó hasta unos 30 metros
El jefe de Gobierno de Madhya Pradesh, Shivraj Singh, informó a los medios de que la niña "se quedó inicialmente atascada a una profundidad de unos 12 metros, pero debido a las vibraciones causadas por las máquinas involucradas en su operación de rescate, se deslizó más abajo hasta unos 30 metros, lo que dificulta la tarea".
Además, señaló que el Ejército de la India se unió en las últimas horas a las labores de rescate, en las que también participa la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF).
Imágenes de las operaciones de rescate compartidas por la agencia india PTI muestran a varias decenas de personas, entre ellas varios miembros de la Fuerza Estatal de Respuesta a Emergencias por Desastres (SDERF), en torno al pozo, con excavadoras de fondo que trabajan para remover la tierra de los alrededores.
La India vivió un rescate similar hace un año, cuando el pequeño Rahul, de 10 años, cayó a un pozo en el norte del país y logró ser rescatado con vida tras una operación que duró más de 100 horas.
No obstante, otro niño de dos años falleció a finales de octubre de 2019 en el sur de país tras caer a un pozo de unos 30 metros de profundidad. (Con información de EFE)
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