El Gobierno calificó como un éxito la violenta campaña contra las drogas iniciada por el presidente Rodrigo Duterte.
El Gobierno de Filipinas anunció que casi 3,000 personas han muerto desde el 30 de junio, producto de la guerra contra el narcotráfico impulsada por el presidente Rodrigo Duterte.
Cifras de fallecidos. El secretario de comunicaciones de la Presidencia, Martin Andanar, señaló que 1,466 supuestos narcotraficantes fallecieron en operaciones policiales en poco más de 10 semanas. Otras 1.490 personas a manos de grupos de los llamados "vigilantes", personas que se toman la justicia por su mano.
Tilda de "éxito" la guerra contra drogas. "Las muertes que tienen que ver con guerras internas de bandas que se eliminan unas a otras son un claro motivo de preocupación. No están bajo el ámbito de la ley", dijo Andanar, aunque consideró de "éxito" la violenta campaña contra las drogas.
Detenciones. Aseguró que la campaña, muy cuestionada por organizaciones internacionales como la ONU, ha llevado a la detención de más de 16.000 supuestos traficantes y consumidores, mientras que más de 700.000 se han entregado a las autoridades.
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