Los tentáculos de las empresas brasileñas también llegaron a Chile. El excandidato Marco Enríquez-Ominami también es investigado por corrupción.
El Gobierno de Michelle Bachelet ha negado rotundamente que la empresa OAS, investigada por casos de corrupción en Chile, haya financiado la campaña de la entonces candidata en el año 2013.
Un reportaje que publicó la revista Veja esta semana asegura que Bachelet recibió una cantidad importante de fondos de la cuestionada constructora para financiar su carrera electoral.
"Ya hubo un intento en el pasado por vincular la campaña de la Presidenta Bachelet con esa empresa. Tal como en esa oportunidad, descartamos decididamente cualquier vinculación entre la campaña y la empresa, tajantemente", dijo la portavoz del gobierno Paula Narváez.
Otros implicados. La publicación periodística aduce que en una visita de Lula da Silva, expresidente brasileño, se reunió con la ahora mandataria. El subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, aseguró que la campaña se ajustó a las normas y requerimientos para su financiación.
La empresa OAS ha sido vinculada también a la campaña presidencial de Marco Enríquez-Ominami en 2013, caso que sí es investigado por la Fiscalía, en relación al uso de un avión ejecutivo que la firma brasileña le facilitó para sus actividades proselitistas. (Con información de EFE).
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