Perú, Argentina, Brasil y Paraguay se encuentran en la segunda categoría, que es de 'alto riesgo'.
Latinoamérica es la región con mayor riego de sufrir crímenes violentos del mundo, debido a la prevalencia del tráfico de drogas, los secuestros, las extorsiones y los robos, según un informe de la consultora británica Verisk Maplecroft.
Seis países latinoamericanos están en la categoría de violencia 'extrema'. Guatemala y México ocupan la segunda y tercera posición, respectivamente, en el ránking de países más peligrosos, detrás de Afganistán.
En la cuarta ubicación a nivel mundial está Irak, seguido de Siria. Aparece en la lista otro país latinoamericano. Se trata de Honduras, en la sexta posición, Venezuela en la séptima y El Salvador en la octava. Colombia ocupa la decimosegunda plaza. Otros cuatro países de la región son descritos como de 'alto riesgo': Argentina, Brasil, Paraguay y Perú.
"Dado que cuenta con seis de los trece países calificados de 'extremos', Latinoamérica es la región del mundo con un mayor riesgo", señala la consultora en su informe.
Droga. En México y Centroamérica, Verisk Maplecroft destaca la presencia de organizaciones dedicadas al tráfico de drogas como la principal causa de los altos niveles de criminalidad, que tienen un coste económico para la región de 200,000 millones de dólares al año (188,000 millones euros).
"La presencia generalizada de traficantes ha provocado uno de los más alto niveles de crímenes violentos del mundo, dado que los grupos luchan por el territorio y por controlar las rutas de transporte de droga hacia los consumidores de las economías desarrolladas. Esos grupos, además, están involucrados en secuestros, extorsiones y robos", menciona la firma británica, que alerta de que ese escenario incrementa el gasto de las empresas en seguridad y las tasas que deben pagar a las aseguradoras.
El reciente incremento en la producción de metanfetaminas en Centroamérica indica que los grupos están extendiendo sus redes de producción más allá de sus localizaciones tradicionales, como México y los Estados Unidos, según el documento.
Muertes. Los casos de homicidios en México ascendió en 2015 a 17 por cada 100,000 habitantes, una 'proporción abrumadora', según la consultora, que calcula el coste económico de la violencia en el país en cerca de 134,000 millones de dólares al año.
"Las mejoras tempranas que logró el presidente (Enrique) Peña Nieto se han diluido y las tasas de homicidios comenzaron a subir de nuevo", analiza Grant Sunderland, analista de la firma de riesgos en México.
Algunos países de Suramérica, como Venezuela y, en menor medida, Colombia, afrontan muchos de los mismos retos que Centroamérica. Brasil, la mayor economía de la región, "ha registrado un progreso significativo a la hora de rebajar el crimen en algunas de sus principales ciudades en la última década", destaca el informe.
Aún así, se mantiene como "el segundo mayor consumidor de cocaína en América" y continúa siendo una ruta de tráfico para los narcóticos producidos en Perú, Bolivia y Paraguay.
Informe. Se investigó a 198 países y los ubicó en cuatro categorías: riesgo extremo, alto riesgo, mediano y bajo riesgo. "Estos altos índices obligan a los distintos gobiernos a comprometer cuantiosos fondos públicos al combate de la delincuencia, en vez de direccionar esas sumas a inversiones en educación, salud, entre otros", dijo a BBC Mundo Jimena Blanco, jefe del equipo investigador en América Latina.
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