Las grandes potencias se mostraron consternadas por lo sucedido e hicieron un llamado a la calma para el cese al fuego.
El enfrentamiento entre el Ejército israelí y palestinos en la Franja de Gaza que dejó más de 50 muertos y decenas de heridos causó una oleada de indignación en la comunidad internacional y un llamado a la calma. Los palestinos protestaron este lunes en rechazo a la inauguración de la embajada de Estados Unidos en la ciudad de Jerusalén, porque aspiran y reclaman un Estado propio.
Contexto
Sin embargo, EE.UU. insiste en que el traslado de la sede de la embajada de Tel Aviv a Jerusalén no prejuzga los límites definitivos de la ciudad. El diciembre del año pasado el presidente Donald Trump reconoció a Jerusalén como capital de Israel y ordenó el traslado de la embajada.
Según el diario El País, el Ejército había advertido a la población gazatí, mediante octavillas escritas en árabe lanzadas desde aviones, de que no se acercara a la valla de separación. Unidades de combate, fuerzas especiales, servicios de inteligencia y francotiradores fueron enviados a la frontera hasta duplicar el despliegue militar existente.
Mientras se vivía un campo de batalla en Gaza, en Jerusalén se realizaba con normalidad la ceremonia de inauguración por parte de una delegación estadounidense integrada por Ivanka Trump, asesora e hija del presidente Donald Trump; su esposo, Jared Kushner, consejero presidencial, el secretario de Tesoro, Steve Mnuchin y el subsecretario de Estado, John Sullivan.
Reacciones
La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, dijo que su país está preocupado por “las informaciones sobre violencia y pérdidas de vidas en Gaza”. Pedimos calma y control para evitar acciones destructoras de los esfuerzos de paz", dijo un portavoz de la funcionaria.
"Francia una vez más hace un llamado a las autoridades israelíes para que ejerzan el discernimiento y la moderación en el uso de la fuerza", dijo el ministro de Relaciones Exteriores, Jean-Yves Le Drian.
El Gobierno de España en un comunicado informó que está consternado por el elevado número de manifestantes muerto y heridos e hizo un llamado urgente a “la contención de todos los actores, que deben evitar cualquier medida en los próximos días que provoque más víctimas entre la población civil.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dijo que rechaza esta decisión que viola la ley internacional y las resoluciones de la ONU. "Con su último paso, Estados Unidos ha elegido ser parte del problema, no de la solución, y ha perdido su papel como mediador en el proceso de paz" en Oriente Medio, lamentó Erdogan.
El portavoz del Kremlin (Rusia), Dmitri Peskov, fue consultado sobre el temor de Rusia de que la mudanza de la embajada estadounidense agrave la situación en esa región: "Sí, nosotros tenemos nuestros temores, ya lo hemos dicho".
"Estamos convencidos de que no hay que cambiar unilateralmente decisiones de la comunidad internacional, y el destino de Jerusalén debe decidirse a través de un diálogo directo con los palestinos", dijo el ministro de Relaciones Exteriores de ese país. Serguéi Lavrov.
(Con información de AFP).
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