El opositor Julio Borges condenó, además, la instauración de una Asamblea Constituyente.
El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Julio Borges, descartó este miércoles la posibilidad de conseguir un acuerdo político mediante el diálogo con el Gobierno de Nicolás Maduro. Además, precisó que, más que una crisis de poderes, lo que se vive en el país es un "grave problema humanitario".
"Hubiera sido lo sensato, pero los intentos fracasaron y ahora esa vía está extinguida", dijo Borges sobre recurrir a la vía de la conversación con el chavismo. El funcionario mantuvo un intercambio de opiniones con los eurodiputados de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo.
Insistió en elecciones. Reiteró ante los eurodiputados su reclamación de que se convoquen elecciones libres y negó la legitimidad de la Asamblea Constituyente."Ni es constituyente ni democrática", señaló sobre una asamblea con la que, a su juicio, Maduro "quiere arrogarse más poder para estar para siempre en el Gobierno", al tiempo que aseguró que "su propósito (el de Maduro) es ser una fotocopia del modelo fracasado cubano".
Además, dijo "agradecer y respetar" todas las opiniones sobre la situación venezolana, incluso "las que el Gobierno de Maduro prohíbe". En los últimos tres años, el Parlamento Europeo ha aprobado cinco resoluciones contra la represión del régimen chavista, en las que se reclamaba principalmente la liberación de presos políticos, el acceso de ayuda humanitaria y la convocatoria de elecciones. (Con información de EFE)
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