Marcos Llunas y Jordi encantados con limeñas

Jordi y Marcos Llunas llevan el arte en la sangre y nacieron escuchando la música que hasta ahora sigue haciendo su famoso padre, el cantante Dyango. RPP Noticias conversó con ellos.

"Debe ser difícil para tí Marco, estar en casa un día y ver a tu padre a un lado y a tu hermano al otro. tres estrellas en un solo campo. ¿Cómo hacen o no hacen nada?", preguntamos.

"No solo son mi padre y mi hermano sino mis tíos y otros familiares que se juntan cada vez que podemos. Empezamos a cantar y no paramos. Mayormente hacemos villancicos, es todo muy intenso y muy lindo", responde.

"Tu padre grabó hace varios años una producción de boleros, en el que figuraba "Dos gardenias", mucho antes que a Luis Miguel se le ocurriera lanzar sus versiones. ¿Ustedes cantan boleros?", interrogamos.

"No solo boleros sino también música peruana que nos gusta mucho, tanto como su comida y sus mujeres. Lo de los boleros con Luis Miguel tuvo un manejo que superó al que se hizo con la producción de mi padre. Además entonces se incidió mucho en su imagen que fue lo que le dio la fórmula del éxito", responden.

"Hace poco estuvieron en la Teletón y con esa visita ya perdimos la cuenta de las veces que han venido al Perú", les preguntamos.

"He vuelto cada vez que he podido y es que Perú es un país muy especial. Ha cambiado muchísimo en los últimos años. La gente sigue igual de cariñosa pero todo está mejor. Es un lugar donde uno se podría quedar a vivir y es que se come tan bien. El problema es que en un mes ganaría como diez kilos", menciona Marco.

"A mí me gusta el ají, no sabes, el tiradito, el cebiche, el anticucho, todo lo que lleve ají", añade Jordi.

Marco y Jordi pasaron varios días en Lima, estancia que calificaron de "encantadora". Tuvieron ocasión de presentarse en diversos programas de Tv y han dejado un grato recuerdo, sobre todo en esas tres jovencitas que lograron tener una cita con estos cantantes a través de un concurso que organizó el programa "Lima Limón". Ellos han prometido volver y aquí los esperaremos con los brazos abiertos.