Un grupo de mujeres cajamarquinas decidieron encadenarse las rejas de la iglesia como una acción de protesta ante el cambio del padre Pedro Cáceda.
Un grupo de feligreses, en su mayoría mujeres, no tuvo mejor idea que tomar el atrio de la iglesia La Recoleta, en la ciudad de Cajamarca, como medida de protesta ante el cambio del párroco Pedro Cáceda, quien por orden superior tuvo que dejar la iglesia después de más de veinte años.
Las amas de casa colocaron carteles en el perímetro del atrio con lemas alusivos a la exigencia de no cambiar al párroco Cáceda.
Asimismo, exigiendo un diálogo con el obispo de Cajamarca para explicar el motivo de su pedido.
La reja principal del recinto religioso permanece encadena.
Una de las feligresas sostuvo que de no ser atendidas por el obispo de Cajamarca, las medidas de protesta serán más radicales.
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