Los restos del niño de dos años que fue envenenado por su propia madre en su vivienda de la ciudad ancashina de Casma, son trasladados al cementerio general del sector, donde recibirá cristiana sepultura.
En tanto, la audiencia judicial contra la madre del menor, Lady Ancajima Ortiz, de 23 años, quien ha sido acusada del crimen, fue suspendida hasta mañana, debido a que el defensor público Carlos Jondec López, asumió la defensa de la progenitora solo unas horas antes.
Fuentes del Ministerio Público informaron que la fiscal Ana Sánchez ha solicitado nueve meses de prisión preventiva para la mujer que le dio de beber a su hijo una sustancia tóxica mezclada con jugo.
La policía del sector dio a conocer que la progenitora habría confesado que planificó el crimen de su vástago para que no se burlen de él y para presionar a su esposo, ya que este pretendía abandonar su hogar.
El sepelio del pequeño se realiza en medio de dramáticas escenas de dolor y de absoluto hermetismo de parte de sus familiares.
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