Jesús Moliné opinó que corresponde a las autoridades locales unir esfuerzos y adoptar medidas en conjunto que permitan superar el problema.
Ante la propuesta de declarar el toque de queda en la ciudad de Chiclayo, el Obispo de la Diócesis de esta ciudad, Jesús Moliné, manifestó que el Poder Ejecutivo y los sectores involucrados deben estudiar bien esta situación y no adoptar acciones aisladas.
Manifestó que urge combatir la delincuencia porque hasta la misma Iglesia fue víctima de robos; pero corresponde a las autoridades locales unir esfuerzos y adoptar medidas en conjunto que permitan superar el problema.
“Hay que estudiar bien estas propuestas porque adoptando acciones aisladas no se consigue nada. Lo que sí se debería ejecutar es un trabajo en conjunto por parte de las autoridades”, refirió Moliné Labartha.
En otro momento, se mostró en desacuerdo con la aprobación del protocolo del aborto terapéutico, indicando que es un tema que obedece a intereses económicos e ideológicos de ciertos grupos.
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