Las viviendas construidas con cañas, palos y esteras son las más afectadas con las últimas precipitaciones registradas en esta ciudad.
Unas 150 familias del asentamiento humano 25 de Mayo de Chimbote (Áncash) conviven entre agua estancada, barro y la proliferación de zancudos, debido a las últimas lluvias que se registran en la ciudad.
Esta situación fue mostrada por los pobladores de la zona, quienes han elaborado sus viviendas con palos, cañas y esteras al 100%, por lo que han sido severamente afectadas por las precipitaciones pluviales.
Estas familias hoy se encuentran en zozobra, debido a que todo este asentamiento humano no está preparado para soportar intensas lluvias, que han sido pronosticadas por los expertos.
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