Eurodiputados piden a la comunidad internacional “no mirar para otro lado” ante la crisis política y social en el Perú

Desde el inicio de las manifestaciones sociales en contra del gobierno de Dina Boluarte, más de 60 personas han muerto y más de 1 800 han resultado heridas a raíz de las protestas.

Un grupo de tres eurodiputados del Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea solicitó este miércoles al alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, que haga un "llamado a la paz" en Perú y que se envíe una delegación de alto nivel para buscar una "solución política" a la crisis que azota al país.

El europarlamentario español Manuel Pineda (Unidas Podemos) y los parlamentarios portugueses Sandra Pereira (Partido Comunista de Portugal) y José Gusmao (Bloco de Esquerda) demandaron en una rueda de prensa que la comunidad internacional "tome cartas en el asunto y no mire para otro lado" ante el "atropello al pueblo peruano".

"Vamos a trasladarle a las instituciones europeas y, especialmente (...) a Borrell, el informe que vamos a elaborar y, además, le vamos a pedir que haga un llamamiento a la negociación política (...). También vamos a hacer que envíe una delegación de alto nivel para que la UE tome cartas en el asunto de forma no injerencista y que trate de mediar contra este régimen de terror", dijo Pineda.

De este modo y tras reuniones con sindicatos y asociaciones, organizaciones estudiantiles y fuerzas de izquierdas, los diputados de Bruselas exigieron que los gobiernos europeos no vendan armas a Perú por hacer uso de ellas contra su propia población.

Pineda aseguró que tras la muerte de los manifestantes hay un "autor intelectual" y "jerárquico" que consideró que es la presidenta Dina Boluarte, el Congreso que la avala y las fuerzas del orden.

Al mismo tiempo, Pineda alertó, en base a la información recibida en las reuniones, de la presencia de "grupos paramilitares" que "de forma no uniformada" atacan a los manifestantes antigubernamentales que exigen la renuncia de Boluarte, el cierre del Congreso, el adelanto de elecciones a 2023 y la convocatoria de una asamblea constituyente.

Por otro lado, Pereira hizo hincapié en que en todas las reuniones celebradas "hay una frase constante: 'no más muertos'", y señaló que para eso todos los manifestantes repiten que Boluarte ha de renunciar porque dijo que ellos no van a desistir en sus reclamos.

Critican la “desmedida” acción policial contra los manifestantes

A juicio de Pineda, la respuesta del Gobierno, la Policía Nacional de Perú (PNP) y el Ejército a las protestas permiten catalogar la situación del país andino como "una dictadura autoritaria, sangrienta y que, por las prácticas que están llevando a cabo, no sería descabellado llamarlo el inicio de un proceso fascista".

Pereira también calificó de "desmedida" la "represión" por parte de las autoridades contra los manifestantes que salen "pacíficamente a las calles para reclamar por sus derechos".

Desde el inicio de las protestas tras el anuncio del exmandatario Pedro Castillo de cerrar el Congreso, reformar el poder judicial y gobernar por decreto, 59 personas han muerto y más de 1 200 han resultado heridas a raíz de las protestas, según reporta la Defensoría del Pueblo.

Pineda, quien señaló que ese mensaje a la nación de Castillo fue "bastante equivocado" y un "error sin atenuantes", evitó catalogar las palabras del expresidente, hoy en prisión preventiva, de intento de autogolpe de Estado.

Entre los fallecidos, 47 manifestantes murieron a raíz de los enfrentamientos con las fuerzas del orden y un policía fue quemado vivo en Juliaca, la mayor ciudad del departamento sureño de Puno que hace frontera con Bolivia.

Pese a las cifras anunciadas por la Defensoría, a raíz de las protestas también se contabilizaron 11 decesos relacionados con los cortes de carreteras y, según la PNP, la muerte por arma de fuego de un conductor de camión en el norteño departamento de La Libertad que se negó a pagar el chantaje.

Asimismo, Boluarte anunció la muerte de otro paciente que necesitaba llegar a Lima pero quedó retenido en los bloqueos, y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) reportó la muerte de cuatro haitianos, además de un bebé nonato confirmado por Unicef.

(Con información de EFE)