Fieles inician homenaje a la imagen de la virgen de Cocharcas

No interesaron los ocho kilómetros que tenían que caminar por tal de llegar hasta el santuario de la virgen de Cocharcas en el distrito de Sapallanga (Huancayo), con tal de venerar a la sagrada imagen.

Y así empezó el recorrido desde la catedral de Huancayo, el sábado 3 de setiembre, hasta el santuario de la virgen, el cual se inició a las 7 de la mañana y culminó al mediodía con la misa oficiada por el arzobispo, monseñor Pedro Barreto Jimeno.

Esta es una tradición que se inició en el año 1992, con la llegada del entonces arzobispo de Huancayo, monseñor José Paulino Ríos Reynoso. Al principio fueron unas cuantas personas que no llegaban a cien, y con el correr de los años se cuenta ahora más de 50 mil los peregrinos.

Pero la peregrinación no solo se realiza en Sapallanga sino también en Orcotuna, provincia de Concepción, donde los fieles rendirán un homenaje a la virgen este domingo 4 de setiembre.

La historia se remonta a la figura de Sebastián Quimichu, quien en su afán de retribuir los milagros que recibió de la virgen, tomó una réplica de la imagen de la virgen de Copacabana en Bolivia. Luego de ello, anduvo por los pueblos de Andahuaylas, Ayacucho, Huanta, Huancavelica y llegó al Valle del Mantaro, asentándose transitoriamente en Sapallanga.

Fue en este lugar, donde cansado de recorrer varios puntos se quedó a descansar en el paraje de Llamus, hoy anexo de Cocharcas, dejando la imagen de piedra, de 25 centímetros, a su costado; sin embargo, al despertar, según cuentan los antepasados, ya no estaba a su lado, interpretándose este hecho como que la virgen quería quedarse en Sapallanga.

Quimichu al no encontrar la imagen que cargaba retornó a su tierra natal desconsolado; sin embargo, se dice que la virgen fue hallada en un manantial.

Esta situación produjo una algarabía por lo cual los pobladores hicieron una fiesta, instituyendo su celebración el mes de setiembre, con el nombre de Cocharcas, en honor al pueblo de donde procedía.

La virgen de Cocharcas es patrona del valle del Mantaro. En el año 1965 fue coronada como Reina y Patrona del VII Congreso Eucarístico Nacional.

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