Lula recibirá a García Perez en la capital del estado fronterizo de Acre, donde también se realizará una reunión de representantes del sector privado.
Los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y Perú, Alan García, se reunirán mañana en la ciudad amazónica de Río Branco, donde renovarán su apuesta en el comercio y la integración como fórmula para atajar la crisis financiera global.
Lula recibirá a García en la capital del estado fronterizo de Acre, donde también se realizará una reunión de representantes del sector privado que será clausurada por los mandatarios y para la cual se han inscrito unas 160 pequeñas y medianas empresas peruanas y brasileñas.
El principal objetivo del encuentro entre Lula y García, dijo el portavoz de la Presidencia brasileña, Marcelo Baumbach, es estudiar medidas para "estimular el intercambio, el desarrollo de las zonas fronterizas e impulsar la integración energética".
El comercio entre Brasil y Perú ha experimentado un firme aumento en los últimos años y ha pasado de 724 millones de dólares en 2003 a cerca de 3.300 millones de dólares en 2008, pero ambos Gobiernos creen que existen posibilidades de ampliarlo aún más.
"Hay mucho que explorar en materia de cooperación en las regiones fronterizas", declaró Baumbach, quien precisó que Lula y García han decidido estrechar más los lazos en el área de energía y apostar en la integración física como forma de minimizar el impacto de la crisis global en ambas economías.
Brasil "está convencido de que la integración suramericana debe ser parte esencial de la respuesta a la crisis internacional e ir más allá de la creación de un simple espacio económico, para buscar un modelo que promueva el comercio y también la justicia social", dijo Baumbach.
En el apartado energético está previsto que mañana sea firmado un acuerdo para la construcción de seis centrales hidroeléctricas conjuntas en la frontera.
El proyecto tendrá un coste de unos 4.000 millones de dólares y será desarrollado por las empresas Eletrobras y Electroperú, que además firmarán un convenio para la interconexión eléctrica en la región fronteriza, dentro del marco de esa iniciativa.
En relación con la integración física, Lula y García inaugurarán un tramo de 600 kilómetros de la Carretera Interoceánica Sur, que unirá a la Amazonía brasileña con la costa peruana del Pacífico a través de un total de 2.500 kilómetros de redes viales.
Según previsiones de ambos Gobiernos, la carretera interoceánica deberá estar concluida en su totalidad para el 2011 y servirá para potenciar el comercio bilateral, así como para dar una salida al Pacífico a los productos brasileños y facilitar el acceso de las exportaciones peruanas al océano Atlántico.
Coincidiendo con la inauguración del nuevo tramo de la carretera, mañana comenzará a funcionar una línea de autobús entre Río Branco y la localidad peruana de Puerto Maldonado.
Para reforzar el interés de ambos países en llevar la integración hacia las fronteras, en el encuentro de los mandatarios también está previsto que estén presentes los gobernadores de nueve regiones del Perú y de cuatro estados brasileños.
Según fuentes oficiales, a la cita de Río Branco asistirán los presidentes de los gobiernos de las regiones peruanas de Ayacucho, Arequipa, Apurímac, Ica, Cuzco, Madre de Dios, Moquegua, Puno y Tacna, así como los gobernadores de los estados brasileños de Acre, Rondonia, Mato Grosso y Amazonas.
Lula recibirá a García en la capital del estado fronterizo de Acre, donde también se realizará una reunión de representantes del sector privado que será clausurada por los mandatarios y para la cual se han inscrito unas 160 pequeñas y medianas empresas peruanas y brasileñas.
El principal objetivo del encuentro entre Lula y García, dijo el portavoz de la Presidencia brasileña, Marcelo Baumbach, es estudiar medidas para "estimular el intercambio, el desarrollo de las zonas fronterizas e impulsar la integración energética".
El comercio entre Brasil y Perú ha experimentado un firme aumento en los últimos años y ha pasado de 724 millones de dólares en 2003 a cerca de 3.300 millones de dólares en 2008, pero ambos Gobiernos creen que existen posibilidades de ampliarlo aún más.
"Hay mucho que explorar en materia de cooperación en las regiones fronterizas", declaró Baumbach, quien precisó que Lula y García han decidido estrechar más los lazos en el área de energía y apostar en la integración física como forma de minimizar el impacto de la crisis global en ambas economías.
Brasil "está convencido de que la integración suramericana debe ser parte esencial de la respuesta a la crisis internacional e ir más allá de la creación de un simple espacio económico, para buscar un modelo que promueva el comercio y también la justicia social", dijo Baumbach.
En el apartado energético está previsto que mañana sea firmado un acuerdo para la construcción de seis centrales hidroeléctricas conjuntas en la frontera.
El proyecto tendrá un coste de unos 4.000 millones de dólares y será desarrollado por las empresas Eletrobras y Electroperú, que además firmarán un convenio para la interconexión eléctrica en la región fronteriza, dentro del marco de esa iniciativa.
En relación con la integración física, Lula y García inaugurarán un tramo de 600 kilómetros de la Carretera Interoceánica Sur, que unirá a la Amazonía brasileña con la costa peruana del Pacífico a través de un total de 2.500 kilómetros de redes viales.
Según previsiones de ambos Gobiernos, la carretera interoceánica deberá estar concluida en su totalidad para el 2011 y servirá para potenciar el comercio bilateral, así como para dar una salida al Pacífico a los productos brasileños y facilitar el acceso de las exportaciones peruanas al océano Atlántico.
Coincidiendo con la inauguración del nuevo tramo de la carretera, mañana comenzará a funcionar una línea de autobús entre Río Branco y la localidad peruana de Puerto Maldonado.
Para reforzar el interés de ambos países en llevar la integración hacia las fronteras, en el encuentro de los mandatarios también está previsto que estén presentes los gobernadores de nueve regiones del Perú y de cuatro estados brasileños.
Según fuentes oficiales, a la cita de Río Branco asistirán los presidentes de los gobiernos de las regiones peruanas de Ayacucho, Arequipa, Apurímac, Ica, Cuzco, Madre de Dios, Moquegua, Puno y Tacna, así como los gobernadores de los estados brasileños de Acre, Rondonia, Mato Grosso y Amazonas.
- EFE-
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