La madre de la víctima fue quien dio aviso a la Policía, tras encontrar a su hija de 24 años, con una soga atada al cuello y tendida sin vida sobre su cama.
Teodosia Herrera Quispe, fue quien dio aviso a la Policía, tras encontrar a su hija Carmen Herrera Hernández de 24 años, con una soga atada al cuello y tendida sin vida sobre su cama.
La Policía inició un operativo en la zona y logró la captura de Fermín Palomino Urbano (27), quien confesó haber cometido el crimen. Dijo que halló a la víctima conversando con otro sujeto, consideró el hecho un acto de infidelidad y por ello la asesinó.
La mujer deja huérfanos a sus dos hijos de tres y cinco años.
Con presencia de fiscal de turno se procedió al levantamiento del cadáver y el cuerpo fue trasladado a la morgue de la ciudad de Ica.
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