En una entrevista con el programa Nada está Dicho, el sociólogo destacó la capacidad de los peruanos para sobreponerse en situaciones complicadas.
En medio de un clima de constante crisis política, hablar de felicidad en el Perú podría resultar paradójico. Sin embargo, el sociólogo Jorge Yamamoto señaló que estudios demuestran que el peruano sabe sobreponerse a estas adversidades.
"Nuestros estudios sistemáticamente encuentran que los peruanos estamos jodidos, pero contentos. Que tenemos históricamente unas situaciones complicadas, pero que hemos aprendido a salir adelante frente a las dificultades", señaló en una entrevista con el programa Nada está dicho, con Renato Cisneros.
Pese a esto, alertó que las diferentes mediciones encuentran que la felicidad en el país está disminuyendo y que incluso el Perú se encuentra en la parte baja de América Latina, entre otros factores por el crecimiento de los antivalores.
El investigador explicó que cuando un país combate la pobreza extrema y mejora su economía, aumenta la felicidad; pero cuando se comienza a gastar en bienes materiales, la felicidad se va reduciendo. "Los valores van disminuyendo cuando aumentan las metas materiales", señaló.
En otro momento, el sociólogo comentó que dentro del llamado 'sueño peruano', se está incrementando el tipo de familia que se enorgullece de tener plata. En su opinión, esto hace que aumente el endeudamiento, el estrés económico y que se reduzcan los valores.
¿Cómo se percibe el peruano de cara al bicentenario?
En otro momento, el investigador reveló que existen elementos comunes en todos los peruanos que definen su identidad. En ese sentido, consideró necesario poner en agenda minimizar los antivalores y promover los valores para generar felicidad.
"Los peruanos somos chamba, de ahí que trabajemos corrupta o correctamente es otro negocio. Los peruanos somos leales, el problema es que somos leales a nuestra argolla, no a la Nación. Somos envidiosos, chismosos y egoístas con la gente fuera del grupo: sin un peruano progresa el otro se siente miserable", señaló.
Yamamoto también reconoció que existe el peruano trabajador, que ayuda a los demás, así sea a su propia familia. "Esto tiene que ver con los valores y este es el gran tema olvidado del bicentenario. Los peruanos no podemos ser verdaderamente felices con la corrupción, los antivalores y el comportamiento contra ciudadano ", opinó.
Huancayo: la ciudad con los mejores índices de felicidad
El sociólogo indicó que las pequeñas comunidades de los Andes y la Amazonía encabezan los índices de felicidad en el país. "Tienen paisajes maravillosos, todos [sus habitantes] cooperan, hay armonía social y las autoridades, donde son elegidos democráticamente, son los mejores representantes del compromiso con la sociedad", manifestó.
El investigador dijo que en el caso de las grandes urbes, Huancayo, que se ubica en el centro del país, es la ciudad más feliz. "Tiene los mejores índices de bienestar, valores más altos, sentido de trabajo, pero también espacio para la diversión", subrayó.
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