Santiago Escobar, quien apareció con el cráneo destrozado y signos de tortura, se disponía a viajar a Arequipa con 16 mil soles antes de su desaparición.
Los asesinos del comerciante Santiago Escobar Mamani (43), cuyo cadáver fue encontrado con el cráneo destrozado y signos de tortura en la región Puno, le arrancaron también los ojos, constató un representante del Ministerio Público.
El hombre, de 43 años, desapareció el domingo último y tres días hallaron su cuerpo sin vida debajo del puente Parco, ubicado en el distrito de Zepita (Chucuito).
Escobar se disponía a viajar a la ciudad de Arequipa con su amigo Jorge Ibáñez, informaron sus familiares, quienes indicaron además que llevaba 16 mil soles para la compra de papas porque pensaba incursionar en este rubro.
El infortunado era muy conocido en la ciudad de Ilave por la venta de carnes rojas.
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