“Mi hija ha vuelto a nacer”, dice María Enríquez. La operación de trasplante se realizó con éxito en el Hospital Nacional Carlos Alberto Seguín Escobedo el último viernes. Después de 26 años se realizó un trasplante de donante vivo en Arequipa.
Todo el amor de una madre se refleja en la historia de María Enríquez Condori, quien decidió donar un riñón a su hija de quince años que padecía de insuficiencia renal. La operación de trasplante se realizó con éxito en el Hospital Nacional Carlos Alberto Seguín de EsSalud, en Arequipa.
Hace dos años, su hija Liz empezó a tener problemas en sus riñones, hasta que el año pasado los médicos le dijeron que necesitaba un trasplante de riñón para que recupere su calidad de vida.
María, a sus 33 años, no dudó en decirles a los médicos que ella sería la donante. A partir de allí le empezaron a realizar los estudios para determinar la compatibilidad y llevar adelante la intervención.
Hace 26 años no se realizaba un trasplante de donante vivo en Arequipa.
“No dudé ni un momento en decidir ser la donante. Ahora estoy feliz porque mi hija prácticamente ha vuelto a nacer, es algo que volvería a hacer sin dudarlo”, dice María.
La operación de trasplante se realizó el último viernes 21 de junio y desde ayer, María Enríquez, volvió a su hogar. Liz permanecerá en el hospital hasta la próxima semana.
Los médicos del seguro social, mediante una operación laparoscópica, retiraron uno de los riñones de María y lo trasplantaron a su hija. La operación duró más de ocho horas.
“La intervención fue exitosa, la madre podrá volver a trabajar en pocos días y la menor también recuperará su calidad de vida”, dijo el médico Raúl Hinojosa Cornejo, coordinador de la Unidad de Trasplante Renal del hospital.
Actualmente en Arequipa hay 70 pacientes renales que están en la lista de espera de un trasplante de riñón. Algunos seguro encontrarán un donante entre sus familiares como ocurrió entre María y Liz.
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