A los siete años tuvo esta idea de negocio. Seis años después, su emprendimiento involucra a más de 2 mil niños y adolescentes. “Me apasiona lo que hago”, le dijo a Renato Cisneros.
José Adolfo Quisocala Condori tiene 13 años y es un emprendedor. A su corta edad, dirige su banco llamado ‘Banco del Estudiante Bartselana’, que actualmente cuenta con más de 2 mil clientes, todo ellos niños y adolescentes, entre 10 y 18 años.
El joven empresario conversó con Renato Cisneros en Conexión de RPP Noticias. “La idea surgió cuando cursaba el primer grado de primaria. Fue una idea mía porque me acordé de que mi papá cuando necesitaba dinero, él iba a un banco y le daban. Y me dije ¿por qué no creo un banco para cuando los niños necesiten dinero?”, señaló.
Indicó que cuando comentó la idea de negocio al director y la coordinadora del municipio escolar de su escuela, no estaban muy convencidos. “Muchos se rieron. Cuando pienso en un banco lo relaciono a un economista o que tiene una carrera grande”, detalló.
También contó que desde muy niño le ha gustado leer y opinar en conversaciones. “Mis papás nunca me decían ‘no hables’. […] Mis papás nunca me han dicho que no”, añadió.
Banco del Estudiante Bartselana
Quisocala Condori contó cómo funciona el Banco del Estudiante Bartselana. Dijo que su moneda de operación son los residuos sólidos. “Los niños nos dan sus residuos sólidos. Nosotros los vendemos empresa recicladora que nos apoya y nos da un precio mayor para nuestros socios”, dijo. El dinero va a la cuenta del socio y solo puede ser utilizado cuando este cumple su meta de ahorro.
Consultado sobre si su rol como empresario afecta su etapa de niñez, respondió que le “apasiona” lo que hace. “Tengo momentos de niño. Veo series. Sigo siendo niño solo que hago cosas. Estoy generado un cambio”, sostuvo.
En otro momento, reveló que “en algún punto de mi vida, quise ser presidente del Perú”. Sin embargo, al ver la crisis judicial y política lo ha desanimado. “No importa tener una banda [presidencial] para hacer un cambio en la sociedad”, manifestó.
Padre Rico, Padre pobre
El caso de José Adolfo Quisocala Condori emula una de las más famosas historias de un exitoso libro que inspiró a millones de personas para emprender su propio negocio.
"Padre rico, padre pobre" es la más conocida obra del autor Robert Kiyosaki, que escribiera varios libros sobre las finanzas personales y la independencia económica. En el best seller, Kiyosaki comienza el relato de su historia personal, cuando junto a un amigo deciden "fabricar dinero" y para hacerlo deciden fundir los antiguos tubos de pasta dental para acuñar sus propias monedas.
El autor, nacido en Hawaii, relata que su vida de exitoso empresario se relaciona con la visión que su padre biológico le dio y la mirada ganadora que heredó del padre de su mejor amigo, quien le enseñó los secretos del éxito económico.
En el libro, el autor recomienda a los padres a que hablen de dinero con sus hijos en la mesa familiar, que introducir a los niños en los conceptos elementales de la economía familiar es un punto de partida para comprender el funcionamiento de la economía y las finanzas personales.
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