De acuerdo al informe de la necropsia de ley el interno murió de un edema cerebral. Sus familiares pidieron su repatriación.
Aún es materia de investigación la extraña muerte del colombiano Héctor Agudelo Palacios (32), un recluso que cumplía sentencia en el penal de Puno, ex Yanamayo, por el delito de Tráfico Ilícito de Drogas (TID).
De acuerdo a la versión del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) de puno, el reo sufrió un desmayo repentino en el comedor del penal, y de inmediato se le evacuó la hospital Manuel Núñez Butrón de Puno, donde tras la necropsia de ley revelaron que murió por un edema cerebral.
No obstante, tras una denuncia periodística se conoció que el referido reo había denunciado maltratos y castigos en un lugar denominado “el hueco”, también le habrían amenazado con mandarlo al penal de Challapalca.
Asimismo, se conoció que Agudelo Palacios habría solicitado al Ministerio Público garantías para su vida por las represalias que podrían tomar en su contra si confesaba esos abusos, ya que debía ser cauteloso porque estaba a casi dos meses de conseguir su libertad.
Los restos del colombiano serán repatriados a su país por pedido de sus familiares, mientras que algunas muestras fueron enviadas a Lima para su evaluación y los resultados estarían llegando en unos tres meses.
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