El monseñor consideró que desde el punto de vista moral los médicos en huelga se encuentran en pecado, por haber dejado en abandono a millones de enfermos en todo el país.
El monseñor Luis Bambarén invocó a los médicos en huelga a priorizar su vocación en favor de la vida y la salud, antes que pensar solo en beneficios económicos. Dijo que desde el punto de vista moral se encuentran en una situación de pecado.
"Me pongo en este momento de parte de los enfermos pobres e invoco a los médicos que se pongan la mano al corazón, que piensen en su vocación. Su vocación es por la salud y la vida y no por los bolsillos y la cartera", manifestó el sacerdote en dialogo con RPP Noticias.
Bambarén hizo referencia a las prácticas cristianas recordando las enseñanzas de Jesús sobre la atención a los enfermos y necesitados, por lo que consideró como un pecado la actitud de los galenos.
"Considero que desde el punto de vista moral es un pecado (...) es pecado porque están abandonado a los enfermos (...) Como cristianos que leen el evangelio que se pongan la mano en el pecho y para mi es una situación de pecado con toda claridad", aseveró.
También se refirió a su papel como intermediario entre el Ministerio de Salud y la Federación de Médicos del Perú. Afirmó que ya se había llegado a un acuerdo con el gremio en huelga, pero que en una asamblea posterior cambiaron su posición.
Responsabilizó al presidente de la federación de médicos, César Palomino, de este cambio de actitud y lo calificó de intransigente.
"No es posible que si llegamos a unos acuerdos (...) después el mismo Palomino dice: Monseñor Bambarén nos sorprendió", contó a la vez que señaló que el sorprendido fue él.
Indicó que sí inicialmente estaba del lado de los médicos abogando por sus exigencias, ahora está del lado de los "millones de enfermos que están siendo desatendidos".
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