El suboficial de la Fuerza Aérea recibía entre cinco a ocho mil dólares mensuales por trabajo de espionaje, informó RPP.
Conocido el caso del suboficial de inteligencia de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), quien fue descubierto espiando para Chile, el Gobierno del país del sur habría afirmado que ni la Presidencia ni los altos mandos de las Fuerzas Armadas tenían conocimiento al respecto.
De acuerdo a RPP, el Ejecutivo chileno manifestó que este trabajo habría sido encargado por mandos medios de las Fuerzas Armadas de su país.
De otro lado, se indicó que los pagos al suboficial peruano se realizaban mediante una agencia courier, los cuales eran cobrados por terceras personas.
Asimismo, el militar peruano recibía entre cinco a ocho mil dólares mensuales por este trabajo de espionaje.
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