El jefe del Comando Conjunto sostuvo que la aplicación de una visión inclusiva reconocerá la valentía de los militares y ronderos en su lucha contra el terrorismo.
El Museo de la Memoria debe otorgar un lugar preponderante a las Fuerzas Armadas, manifestó el jefe del Comando Conjunto, Francisco Contreras, tras señalar que corresponde resaltar la valentía mostrada por los militares en su lucha contra la subversión.
"Queremos que la reconciliación sea equitativa y que resalte la labor e las Fuerzas Armadas y que sean los que defienden a la Nación quienes tengan un lugar preponderante en este museo (..) Esperamos y pedimos que el Museo de la Memoria nos de el lugar que nos merecemos", manifestó a la agencia Andina.
Una visión amplia e inclusiva implica, dijo, reconocer el esfuerzo las Fuerzas Armadas y de los comités de autodefensas o ronderos que dieron su cuota de sacrificio en defensa de la democracia.
El Museo de la Memoria tendrá como objetivo representar con objetividad y espíritu amplio la tragedia vivida por el Perú a raíz de las acciones subversivas de Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru durante las dos últimas décadas del siglo XX.
Asimismo, buscará mostrar a los peruanos las trágicas consecuencias que resultan del fanatismo ideológico, la transgresión de la ley y la violación de los derechos humanos, con la finalidad de no volver a repetir esos hechos.
Contreras indicó que en el sector Defensa ya se está avanzando en la selección de las fotografías que se presentarán con el fin de ser incluidas en el Museo de la Memoria.
Sostuvo que las Fuerzas Armadas poseen fotografías que reflejan con mayor profundidad la violencia generada por el terrorismo en las décadas de los ochenta y noventa en el Perú.
La comisión encargada de coordinar y promover el diseño y la construcción del museo está integrado por el escritor Mario Vargas Llosa, el sacerdote Luis Bambarén, el ex presidente de la Comisión de la Verdad , Salomón Lerner, el pintor Fernando de Szyszlo, el jurista Enrique Bernales Ballesteros, el arquitecto Frederick Cooper Llosa y el antropólogo Juan Ossio Acuña.
"Queremos que la reconciliación sea equitativa y que resalte la labor e las Fuerzas Armadas y que sean los que defienden a la Nación quienes tengan un lugar preponderante en este museo (..) Esperamos y pedimos que el Museo de la Memoria nos de el lugar que nos merecemos", manifestó a la agencia Andina.
Una visión amplia e inclusiva implica, dijo, reconocer el esfuerzo las Fuerzas Armadas y de los comités de autodefensas o ronderos que dieron su cuota de sacrificio en defensa de la democracia.
El Museo de la Memoria tendrá como objetivo representar con objetividad y espíritu amplio la tragedia vivida por el Perú a raíz de las acciones subversivas de Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru durante las dos últimas décadas del siglo XX.
Asimismo, buscará mostrar a los peruanos las trágicas consecuencias que resultan del fanatismo ideológico, la transgresión de la ley y la violación de los derechos humanos, con la finalidad de no volver a repetir esos hechos.
Contreras indicó que en el sector Defensa ya se está avanzando en la selección de las fotografías que se presentarán con el fin de ser incluidas en el Museo de la Memoria.
Sostuvo que las Fuerzas Armadas poseen fotografías que reflejan con mayor profundidad la violencia generada por el terrorismo en las décadas de los ochenta y noventa en el Perú.
La comisión encargada de coordinar y promover el diseño y la construcción del museo está integrado por el escritor Mario Vargas Llosa, el sacerdote Luis Bambarén, el ex presidente de la Comisión de la Verdad , Salomón Lerner, el pintor Fernando de Szyszlo, el jurista Enrique Bernales Ballesteros, el arquitecto Frederick Cooper Llosa y el antropólogo Juan Ossio Acuña.
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