El candidato presidencial de la agrupación sostiene que evalúa su renuncia si es que no se respeta el acuerdo político ofrecido en el partido político. Este marte 27 de mayo se tomará una decisión.
A solo meses de que se definan oficialmente las candidaturas para las elecciones generales de 2026, el precandidato presidencial Hernando de Soto ha lanzado duras críticas contra la dirigencia del partido Progresemos, agrupación que lo acoge actualmente como el rostro más conocido para postular a la Presidencia. En declaraciones a RPP, De Soto denunció el manejo irregular del partido, la ausencia de rendición de cuentas y la utilización de su imagen sin transparencia ni coordinación.
“Yo me siento estafado por los líderes. Han dicho ‘lo hemos sometido a usted’ y lo han mandado a vivir en esta choza”, declaró De Soto. El economista señaló que desde hace diez meses ha solicitado reuniones y documentos que nunca llegaron a concretarse. “Tengo fotos de las reuniones programadas, pero sencillamente no aparecen”, dijo.
Uno de los puntos más graves señalados por el precandidato es el manejo financiero. Asegura que distintas personas se han acercado a él para reclamar compromisos pendientes luego de haber entregado importantes sumas de dinero.
“Gente ha venido y ha pedido cita conmigo y me dicen: ‘yo he contribuido con 40 mil dólares, 50 mil dólares, tres oficinas, y hasta ahora no me dicen lo que tengo que hacer’”.
De Soto afirmó que el partido Progresemos está siendo gobernado “por una familia que se ha puesto de acuerdo con unos cuantos amigos para dirigirlo sin control”. Ante este escenario, el economista anunció que esta semana presentará un documento que busca desburocratizar el funcionamiento del partido y modificar el estatuto.
“Este martes van a venir representantes de más de la mitad de las regiones para evaluar nuestra propuesta. Si no se aprueba, renuncio esta semana”, advirtió.
De Soto aseguró haber perdido la confianza en el dirigente nacional de Progresemos, aunque no mencionó nombres directamente. El precandidato aspira a tomar control del partido a través de representantes regionales “que realmente hayan sido elegidos como candidatos y no impuestos por el círculo íntimo que actualmente controla la agrupación”.
La situación pone en riesgo el futuro político de De Soto, quien ya fue candidato en 2021. Su eventual salida del partido podría dejar al economista sin una plataforma electoral.


Video recomendado
Comparte esta noticia