Los miembros de Megaupload participaron en la infracción de copyright criminal y lavado de dinero a gran escala, generándoles unas ganancias de 175 millones de dólares.
Las autoridades estadounidenses han añadido más cargos contra la empresa de servicio de alojamiento de archivos Megaupload. La acusación presentada en una corte federal de Virginia, atribuye a su fundador, Kim Smitchz, y a los demás cofundadores, tres nuevos delitos.
Según el documento de acusación, los miembros de Megaupload participaron "en la infracción de copyright criminal y lavado de dinero a gran escala, generándoles unas ganancias de más de 175 millones de dólares".
Además, organizaron toda la arquitectura del sistema, en torno a la distribución rápida de las obras con derechos de autor.
Asimismo, se les acusa de utilizar materiales de Google y YouTube, poniéndolos a disposición de Megaupload para realizar intercambios que pareciesen acciones legales.
Asimismo, Megaupload mintió con el número de usuarios registrados, de los 66 millones de cuentas registradas de las que se dio constancia, sólo 5,4 millones habían subido alguna vez un archivo con el servicio, según portal de El Mundo.
Hasta el momento, Smitchz ha negado todos los cargos. El fundador de Megaupload se encuentra en prisión intentando evitar una extradición a Estados Unidos, ya que le fue denegada la libertad bajo fianza en Nueva Zelanda.
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