El battle royale tendrá una escena competitiva profesional en nuestra región y brindará cupos a las finales mundiales que se realizarán en Tailandia durante abril del próximo año.
A la paralela de la lucha de PUBG y Fortnite como battle royales, hay un título que también logra encandilar a millones de jugadores amantes de la supervivencia en los celulares. Por supuesto, hablamos de Free Fire, el battle royale creado por 111dots Studio y Garena.
El videojuego posee mecánicas más cercanas a PlayerUnknown’s Battlegrounds y se ha erigido como una fuerte alternativa en el saturado mercado de los battle royales gracias a su gran adaptabilidad a la mayoría de smartphones en el mercado. No es necesario tener un celular costoso de gama alta para jugarlo.
Ante tan buen recibimiento y la gran capacidad de poder adaptar al videojuego a competencias profesionales, Garena y la Liga de Videojuegos Profesional (LVP) realizarán una liga profesional para todas las regiones del mundo con miras a un campeonato global cuyas finales se realizarán en Tailandia en abril del 2019 con millonarios premios. Latinoamérica no será ajena a ella y dos equipos podrán alcanzar cupos a la competencia mundial.
Nuestra región se dividirá en dos: Latinoamérica Norte (LAN) contará con Ecuador, Colombia, Guatemala, Puerto Rico, República Dominicana, Honduras, Nicaragua, Panamá y México; mientras que Latinoamérica Sur (LAS) tendrá a Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Bolivia y Perú.
Las clasificatorias comenzarán el próximo 18 de enero para LAN y el 25 del mismo mes para LAS. Si deseas participar, debes saber que tienes que ser mayor de edad y podrás inscribirte a partir de los primeros días de enero vía el fanpage del organizador. Tú y tu equipo podrán ser las próximas estrellas de los videojuegos.
Free Fire es un shooter en tercera persona, de supervivencia y de forma de battle royale, para dispositivos móviles. En él se desarrolla la historia de 50 jugadores que saltan con paracaídas sobre una isla remota, donde solo habrá un ganador: la última persona viva. Los jugadores escogen su posición inicial, toman armas y suministros para aumentar la oportunidad de supervivencia en el campo de batalla, que se acorta conforme pasa el tiempo, forzando así a los jugadores a enfrentarse uno al otro en un ambiente táctico y diverso.
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