Después de los sucesos que paralizaron el mundo con la resurrección de Jon Snow gracias a Melisandre, el tercer episodio de la sexta temporada de Juego de Tronos mostró las nuevas decisiones que el Lord Commander de la Guardia de la Noche deberá tomar, así como también contó con la reaparación de viejos personajes.

ALERTA SPOILER: EL SIGUIENTE CONTENIDO TIENE SPOILERS DEL ÚLTIMO CAPÍTULO DE JUEGO DE TRONOS

 

 

 

En Oarthbreaker, vemos a un Jon Snow resucitado y sin comprender lo que sucedió a raíz de su regreso a la vida. Sin embargo, Melisandre tiene planes con él, los mismos que no logró Stannis Baratheon. Al otro lado del continente, Daenerys es llevada a Vaes Dothrak donde se reúne con las demás viudas de los Khal y descubre cuál será su destino, que con suerte será quedar confinada en esa ciudad de por vida.

Bran sigue hurgando en el pasado de su familia y tiene un flashback en el que descubre a su padre, Ned Stark, mucho más joven intentando salvar a Lyanna Stark, pero es interrumpido por el Cuervo de Tres Ojos quien le revela que no debe permanecer mucho en el pasado y que su destino es tomar su lugar.

Varys intenta descubrir quien maneja a los Hijos de la Arpía y le ofrece un trato a una de sus colaboradoras. Así descubre que los antiguos amos de Astapor y Yunkai complotaron en su contra para hacerse del gobierno de Mereen. Junto a Tyrion, Gusano Gris y Missandei intentarán tramar un plan para detenerlos.

En King's Landing, Cersei y Jaime intentan tomar parte en el concejo, pero son rechazados. Aún así, intentarán tomar venganza contra los asesinos de Myrcella por su propia cuenta y recurrirán a los "pajaritos" que Varys dejó en la capital. El rey Tommen Baratheon hará valer su autoridad ante el Gorrión Supremo aunque será rápidamente persuadido por él.

En Braavos, para ser más precisos en la Casa de Blanco y Negro, Arya Stark sigue recibiendo un fuerte entrenamiento para convertirse en una Niña sin Rostro y al reconocer que "no es nadie" le es devuelta la visión por Jaqen H'ghar.

Volviendo al Muro, Jon Snow condena a Sir Alliser, Olly y los demás traidores que lo asesinaron, pero al hacerlo, decide poner su cargo a disposición y entregarle su capa a Edd ante el asombro de todos los Guardias de la Noche.