Los falsos perfiles de Facebook disfrazados de mujeres hermosas responden a una gran variedad de utilidades, casi nunca honestas.
Una de las características de Facebook es que nos brinda la posibilidad de interactuar con otras personas y poder entablar una amistad e incluso algo más. No obstante, también puede convertirse en un riesgo si aceptamos a anónimas personas de apariencia agraciada. ¿Por qué son peligrosas las solicitudes de amistad de mujeres en trajes sexys y que no conoces?
Cuentas falsas. "Estos perfiles pueden ser creados por personas o robots y están a la orden del día. Pueden tratar de conseguir más información de uno o quitarle el dinero”, dice Vicente Díaz, analista de la empresa de seguridad informática Kaspersky, a Verne, portal de El País de España.
¿Cuáles son los peligros? Las cuentas falsas responden a una gran variedad de utilidades, casi nunca honestas. Desde proporcionar más seguidores o 'me gusta' en Facebook a un personaje, colectivo o empresa, hasta difundir software malicioso y estafar a los usuarios. Una de las prácticas más populares y con más éxito entre los ciberdelincuentes es el llamado ransomware (de ransom, rescate, y ware, software).
Secuestran tu ordenador. "Ocurre cuando alguien te invita a pinchar en un enlace donde hay, por ejemplo, un divertido vídeo de un gatito", cuenta Díaz. Movido por tu curiosidad le das clic y luego notas que la web te pide instalar un códec para ver el vídeo, que en realidad es un virus que cifra todos los contenidos de tu ordenador con la computadora del pirata informático.
Víctimas de hackers. Segundos después notarás que no puedes acceder a tu propia información almacenada, a no ser que pagues un rescate. Han secuestrado tu disco duro y para volver a acceder tendrás que pagarle a los ciberdelincuentes.
Más riesgos. Otro de los peligros es que personas conocidas en Facebook busquen hacernos daño, chantajear o simplemente recopilar información con la que pueden sacar ventaja. Este procedimiento se denomina “catfishing” y lo suelen realizar ex parejas, compañeros de trabajo y personas que guarden algún rencor.
Recomendaciones. "A veces aceptamos a gente que no conocemos y pensamos que no pasa nada, porque la tenemos ahí, y no interactuamos con ella", advierte Manuel Ransán, experto español en ciberseguridad. La recomendación es no agregar a nuestras redes sociales a personas que no conozcamos y nos parezcan sospechosas, por más que su apariencia física nos deslumbre y estemos tentados a aceptarlas.
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