Robert Fitzpatrick, un neoyorquino de 60 años, está convencido en la veracidad de una fatídica profecía a la que llegó el pastor de un grupo evangélico. Cree que el juicio final será el próximo 21 de mayo.
Robert Fitzpatrick, un jubilado neoyorquino, convencido en la veracidad de una fatídica profecía, gastó unos 140 mil dólares en colocar anuncios por toda la Gran Manzana advirtiendo de que el fin del mundo será el próximo 21 de mayo.
El hombre, de 60 años, actuó influido por un grupo cristiano evangélico Family Radio, cuyo pastor Harold Camping realiza predicciones usando cálculos numerológicos y asegura que quien crea en el Apocalipsis y advierta de que se avecina será salvado y llevado junto a Dios.
Camping llegó a la conclusión de que el fin del mundo se producirá el 21 de mayo de 2011, tras supuestamente estudiar la Biblia y porque, según dice, es exactamente 7 mil años después de que Noé se salvara del Diluvio Universal.
"La Sagrada Biblia da más pruebas increíbles de que el 21 de mayo de 2011 es exactamente el momento del Juicio Final", dice la página web del grupo, según recoge el portal de Cooperativa.cl
Daily News da cuenta que Robert Fitzpatrick está convencido de que un devastador terremoto arrasará con la vida en el planeta, y por eso ha desembolsado 140 mil dólares en decenas de carteles y anuncios publicitarios en varios vagones del metro neoyorquino y en autobuses, con mensajes que comunican a la humanidad que el día del juicio final se producirá el sábado de la próxima semana.
"¡Terremoto global! El mayor de todos los tiempos. Día del juicio final: 21 de mayo", rezan los apocalípticos carteles publicitarios, que además muestran la esfera de un reloj a punto de marcar las doce sobre una fotografía de un paisaje nocturno de Jerusalén y un versículo bíblico.
Comparte esta noticia