Jay Swingler puso su vida en peligro y pudo morir asfixiado. Los bomberos de West Midlands (Inglaterra) hicieron pública su molestia por el incidente.
Jay Swingler y Romell Henry son dos amigos unidos por YouTube y por los retos incomprensibles: desde jugar con explosivos hasta bañarse en pegamento ultra resistente. Solo que su más reciente reto se les escapó de las manos y por poco cobró la vida de Swingler.
A través de su canal TGFbro, la pareja se propuso el reto de meter la cabeza en un microondas y tapar toda entrada de oxígeno posible con Polyfilla, una solución parecida al cemento.
El elegido para semejante 'hazaña' fue Jay Swingler, quien para salvaguardar su vida decidió usar un tubo de plástico para captar aire del exterior. Los problemas empezaron cuando el tubo, por acción de la Polyfilla, empezó a contraerse, cortando el suministro de aire del hombre de 22 años.
Tras varios intentos infructuosos de parte de los compañeros de Swingler por ayudarlo, el grupo decidió llamar a los bomberos de West Midlands (Inglaterra), quienes tras un arduo trabajo lograron salvarle la vida al joven. Él estaba contento y agradecido, pero los hombres de rojo no.
“Todos los involucrados estaban muy arrepentidos, pero esta situación nos pudo haber impedido ayudar a otra persona que sufría un accidente genuino”, dijeron los bomberos en su página oficial.
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