Pequeña Cielo padecía de cirrosis hepática desde su nacimiento. Transplante de hígado se realizó en el Hospital Guillermo Almenara.
Erika Chávez Polo es una humilde madre de familia de Bagua que además de traer a este mundo a Cielo Honorio Chávez, literalmente le acaba de salvar la vida a su hija de tres años al donarle parte de su hígado, en un transplante practicado en el hospital Guillermo Almenara Irigoyen.
La operación que duró quince horas, se practicó el domingo seis del presente y hoy ambas están por ser dadas de alta gracias a su evolución favorable. La pequeña Cielo padecía desde su nacimiento de cirrosis hepática por atrofia de vías biliares, lo que ponía en serio riesgo su vida.
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