La creencia de que el uso constante y descontrolado de antigripales nos sanará más rápido, es errónea.
El incremento del consumo de antigripales que se registra a raíz al cambio de clima y el descenso de las temperaturas es una peligrosa costumbre que puede causar convulsiones, taquicardia, problemas cardiacos y otros daños a la salud de adultos, jóvenes y niños advirtió la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid).
“Los antigripales controlan las molestias generadas por los síntomas de la gripe, no la curan pues son ocasionadas por un virus, siendo nuestro organismo quien se encarga de eliminarlo en un tiempo determinado; por tal razón, es errónea la creencia de que el uso constante y descontrolado de antigripales nos sanará más rápido, pues en lugar de ello podría afectar nuestra salud y, en casos extremos, ocasionarnos la muerte”, explicó el jefe del Equipo de Atención Farmacéutica de la Digemid, Aldo Álvarez Risco.
Detalló que los antigripales son productos de venta libre (no requieren receta) que combinan varios principios activos utilizados para controlar los síntomas de la gripe, como secreción nasal, tos, fiebre o dolores de cabeza.
MEZCLA DE MEDICAMENTOS PUEDE SER PELIGROSO
“El uso inadecuado de esta mezcla de medicamentos en un solo producto podría ser peligrosa. Por ejemplo, si un médico nos ha indicado tomar un antihistamínico para controlar los estornudos y un antipirético para bajar la fiebre, cometeríamos un gran error si decidimos consumir un antigripal (que como hemos visto tiene en su composición estos medicamentos) por cuenta propia pues, como mínimo, podríamos exponernos a una intoxicación”, advirtió.
Álvarez explicó que el consumo excesivo de Dextrometorfano -medicamento utilizado para suprimir la tos- puede generar sedación, dolores de cabeza, mareos, alucinaciones, depresión del sistema nervioso cardiovascular y hasta ocasionar la muerte.
“Lo propio puede ocurrir con antihistamínicos como la Clorfeniramina, utilizados para reducir o eliminar los efectos de las alergias, debido a que pueden ocasionar nerviosismo, temblores, dolores de cabeza, ansiedad, taquicardia, palpitaciones, arritmias cardiacas, depresión del sistema nervioso central y convulsiones”, añadió.
También advirtió sobre los riesgos del abuso en el consumo de descongestionantes nasales y del tracto respiratorio como la Pseudoefedrina y la Fenilefrina, que podrían ocasionar insomnio, temblores, ansiedad, dolores de cabeza, alucinaciones, depresión del sistema nervioso central, convulsiones e hipertensión.
Alvarez agregó que las personas que reciben tratamientos para otras enfermedades -como hipertensión arterial- podrían ver afectada su salud debido a que los antigripales podrían disminuir el efecto de sus medicamentos que recibe para controlarlas.
RECOMENDACIONES
“Ante estos riesgos recomendamos a la población que evite consumir antigripales por tiempo prolongado, no usarlos por ninguna razón si un médico le ha recetado algunos medicamentos para controlar los síntomas de la gripe pues estaría recibiendo dosis mayores a las necesarias y consultar al químico farmacéutico de cualquier farmacia o botica sobre el uso adecuado de estos productos”, concluyó.
Andina
TE PUEDE INTERESAR...
Comparte esta noticia