Si la persona ya ha pasado por 2 a 3 cirugías es una señal de alerta, sobre todo si el retoque es en la misma zona.
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Movidos por alcanzar un ideal de perfección y belleza, algunos abusan de la cirugía estética. Son los cambios drásticos y resultados grotescos, los que preocupan.
Hemos escuchado hablar de la Barbie y el Ken de carne y hueso. Recientemente se dijo que una mujer iraní se sometió a 50 cirugías para parecerse a la actriz estadounidense Angelina Jolie, mientras que dos gemelos del estado de Arizona (EE.UU.) gastaron 15 mil dólares para parecerse en Brad Pitt.
Este tipo de conducta demuestra un problema de fondo, que no se resuelve con intervenciones estéticas. “Son personas con muy baja autoestima, con rasgos obsesivos que las llevan a distorsionar la realidad, incluso colindante con un trastorno psicótico”, explica el psiquiatra Hugo Lozada, jefe de la Unidad de Salud Mental del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN).
Según el especialista, hay una falta de aceptación, baja tolerancia al rechazo, y un comportamiento obsesivo que siempre estará viendo fallas en su aspiración por llegar al prototipo ideal al que erradamente aspira.
Se trata de un comportamiento patológico que se puede controlar con un tratamiento psicoterapéutico. “Si se tiene un fondo depresivo hay que dar terapia farmacológica, o antipsicótica si está saliendo de la realidad”, anota Lozada.
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No cruzar la línea
Michael Jackson, el fallecido ‘Rey del Pop’, es el típico ejemplo de cómo un exceso de cirugías puede distorsionar la apariencia de una persona. La ética profesional debería frenar intervenciones que terminen perjudicando al paciente y dañando más su ya baja autoestima.
“Siempre habrá profesionales buenos y malos; algunos movidos por intereses económicos, van a operar sabiendo que el resultado será insatisfactorio o insuficiente, que se alejará de lo natural y armonioso”, comenta el cirujano plástico Edwin Vásquez.
De acuerdo al experto, si un paciente ya ha pasado por 2 a 3 cirugías es una señal de alerta, sobre todo si el retoque es en la misma zona. “Puede haber un tema de satisfacción personal que no se resuelve con cirugía, sino con terapia”.
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