Una investigación demostró, luego de un experimento de inteligencia, que se activan zonas completamente diferentes en las personas que resuelven problemas de manera creativa y aquellas de forma analítica.
¿Alguna vez cuando has estado frente a un problema complejo y lo has resuelto de una manera metódica o de alguna manera en que jamás pensaste? Pues eso define si era una persona analítica o creativa. Mientras que los analíticos son metódicos y obedecen un proceso, los creativos son proclives a saltarse los pasos y resolver conflictos luego de que se les “prendió” el foco de las ideas.
Investigadores del Laboratorio de Investigación de la Creatividad de la Universidad de Drexel (Estados Unidos) decidieron averiguar qué sucede en el cerebro de cada tipo de persona. El experimento que realizaron estuvo a cargo del investigador postdoctoral, Brian Erickson y John Kounios, profesor de psicología y director del programa de doctorado en Ciencias Cognitivas y Cerebrales Aplicadas en la Facultad de Artes y Ciencias de la Universidad de Drexel.
El estudio consistió en analizar las ondas cerebrales, mediante encefalogramas, en 42 personas. Se les analizó en cuatro sesiones que se extendieron en siete semanas. A los individuos examinados se les monitoreó la actividad cerebral en estado de reposo, es decir, sin resolver nada. Sin embargo, el gran cambio sucedió en la última etapa.
A las personas se les entregó anagramas, que son palabras con el orden de letras alterado. Algunos de los individuos estudiados dijeron que ordenaron la palabra luego de “un golpe suerte”, pero otros de manera metódica.
Luego que los investigadores científicos compararon las ondas cerebrales registradas semanas antes entre ambos tipos de pensadores, se encontró que los ‘analíticos’ mostraron mayores niveles de actividad en los lóbulos frontales del cerebro, mientras que los creativos mostraron más actividad en las áreas cerebrales posteriores, específicamente, los lóbulos temporales y parietales.
"Esta investigación sienta las bases para utilizar los registros de los EEG (encefalogramas) para evaluar el estilo cognitivo de los individuos para el asesoramiento profesional, las pruebas educativas y el desarrollo personal”, afirmó el coautor del estudio, John Kounios.
Investigaciones pasadas han comprobado que el lóbulo frontal, que caracteriza a los analíticos, tiene un papel clave en la organización del pensamiento porque al activarse inhibe otras áreas del cerebro. Incluso, se ha comprobado que cuando esta región cerebral es afectada por algún daño o por el envejecimiento, el pensamiento de la persona se vuelve desorganizado.
En el caso de los lóbulos temporales y parietales que activan los creativos, se comprobó que justamente cuando el lóbulo frontal tiene una menor participación permite que se expresen las ideas inconscientes de estas áreas cerebrales.
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