El cráter de Batagaika no es solo el más grande de su tipo en esta región de Rusia, con casi 1 km. de largo y 86 metros de profundidad, sino que su tamañó aumenta.
(Agencia N+1 / Víctor Román). Uno de los cráteres más grandes de Siberia, conocido como la "Puerta al Inframundo", está creciendo tan rápidamente que está descubriendo bosques, cadáveres de animales prehistóricos y registros climáticos históricos de hasta 200.000 años. Conocido como el cráter de Batagaika, este termokarst es uno de los muchos que han aparecido en esta región oriental de Rusia en los últimos años.
Sin embargo los investigadores creen que Batagaika podría ser una anomalía en la región, ubicada a unos 660 km al noreste de la capital de la región, Yakutsk. No solo es el cráter el más grande de su tipo, casi 1 km de largo y 86 metros de profundidad, sino que se está haciendo más grande todo el tiempo.
La investigación publicada en Quaternary Research por Frank Günther del Instituto Alfred Wegener en Alemania reveló que la pared del cráter ha crecido a un promedio de 10 metros por año en la última década de observaciones. Y en los años más cálidos, el crecimiento ha sido de hasta 30 metros por año. El equipo sospecha que la pared lateral del cráter llegará a un valle vecino en los próximos meses a medida que las temperaturas se calienten en el hemisferio norte, lo que podría provocar un mayor colapso de la tierra.
"En promedio durante muchos años, hemos visto que no hay tanta aceleración o desaceleración de estas tasas, está en continuo crecimiento", dijo Günther a la BBC. "Y el crecimiento continuo significa que el cráter se vuelve cada vez más profundo", añade.
En crecimiento
No son buenas noticias para el cambio climático. La formación del cráter comenzó después de que un gran pedazo de bosque se despejara cerca en la década de 1960. Debido a que el suelo ya no estaba oculto en verano, se calentó más rápidamente que en el pasado, lo que eventualmente causó que el permafrost se derritiera y el suelo colapsara. Las grandes inundaciones en 2008 empeoraron el derretimiento y contribuyeron al tamaño del cráter.
La inestabilidad de la región no solo es peligrosa para los locales, también existe la preocupación de que a medida que el agujero se haga más y más grande, expondrá las reservas de carbono que han estado encerradas durante miles de años. "Las estimaciones globales de carbono almacenado en el permafrost son la misma cantidad que lo que hay en la atmósfera", dijo Günther.
A medida que el cráter continúa fundiéndose, estos gases de efecto invernadero podrían liberarse en la atmósfera, provocando un mayor calentamiento. "Esto es lo que llamamos refuerzo positivo", agregó Günther. "El calentamiento acelera a su vez el mismo calentamiento y estas características pueden desarrollarse en otros lugares”.
No todo es malo
Sin embargo, todo esto podría tener un impacto positivo. De acuerdo a un estudio publicado en febrero de 2017 en la revista Quaternary Research ha demostrado que las capas expuestas por el cráter ahora podrían revelar 200.000 años de datos climáticos. Esto se suma a los restos conservados de bosques enterrados hace mucho tiempo, antiguas muestras de polen e incluso los restos congelados de un mamut y un caballo de 4.400 años.
La investigación fue dirigida por Julian Murton de la Universidad de Sussex, quien dice que los sedimentos expuestos podrían ser útiles para entender cómo el clima de Siberia cambió en el pasado, y predecir cómo cambiará en el futuro.
Si bien la mayor parte del planeta pasó por períodos de enfriamiento y calentamiento en los últimos 200.000 años, la historia climática de Siberia es muy desconocida. Pero según Murton, la última vez que Siberia vio este tipo de caída tuvo lugar hace unos 10.000 años, cuando la Tierra salió de su última Edad de Hielo. Y los niveles actuales de gases de efecto invernadero en nuestra atmósfera son mucho más altos de lo que eran en aquel entonces.
Más investigación
Si los investigadores pueden usar esta información para entender exactamente qué pasó con Siberia la última vez que se fundió el permafrost, podríamos prepararnos mejor para cuando vuelva a suceder. Pero se deben realizar más estudios, Aun no conocemos las fechas exactas del sedimento que se han expuesto en el cráter.
Ahora planea perforar pozos en la región para analizar más sedimentos y obtener una comprensión más precisa de lo que sucedió en el pasado. "En última instancia, estamos tratando de ver si el cambio climático durante la última Edad de Hielo [en Siberia] se caracterizó por una gran variabilidad: calentamiento y enfriamiento, calentamiento y enfriamiento como ocurrió en la región del Atlántico Norte", dice Murton.
El deshielo del permafrost supone un peligro no solo para los humanos sino para toda la vida en la Tierra. Un reciente estudio encontró que grandes depósitos de mercurio estaban atrapados en el permafrost del Ártico y si llegará a descongelarse podría tener serias consecuencias a nuestros ecosistemas.
Esta noticia ha sido publicada originalmente en N+1, ciencia que suma.
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