Las jóvenes estrellas del pop coreano también deben cumplir con su deber. ¿Cambiará esto tras la firma del compromiso de paz entre Corea del Norte y Corea del Sur?
En 1958, el hombre más famoso del mundo de la música, Elvis Presley, eligió enrolarse en el ejército estadounidense. Lo que parece un curioso incidente desde la mirada occidental es parte de la vida común en Corea del Sur. Los ídolos de k-pop ─grupos que cuentan con miles de seguidores en el Perú─ cumplen con el servicio militar obligatorio entre 18 y 35 años.
Es el caso de Big Bang, una de las bandas de k-pop más exitosas que llegó al Perú hace seis años. En el 2016, celebraron su décimo aniversario y recaudaron más de US$ 44 millones. Actualmente, el grupo está inactivo porque 4 de sus 5 miembros están cumpliendo con el servicio militar, que en Corea del Sur se implementó en 1957.
Poco antes de despedirse de los escenarios, Taeyang, uno de sus integrantes, se refirió al futuro de la agrupación. “Hay tareas y responsabilidades frente a nosotros. Los fans se preocupan mucho sobre qué pasará con Big Bang. En lugar de preocuparse, nosotros tenemos una mente positiva. En los próximos 10 años queremos ser líderes en este género”, contó a CNN.
SERVICIO MILITAR: MOTIVO DE ORGULLO
A diferencia de Big Bang, Super Junior ─otra afamada banda de pop coreano─ se mantiene activo aunque dos de sus integrantes sirven en la milicia surcoreana. Solo 7 de los 9 miembros de la banda de k-pop tocaron la semana pasada en Lima. Todos ellos ya cumplieron con su deber y regresaron inmediatamente a los escenarios.
Para Katherine García, vocera del club de fans Super Junior Perú, estas figuras juveniles aceptan esto con orgullo: “han cumplido su deber como ciudadanos y han seguido sin dar peros o excusas. Super Junior tiene 7 miembros activos dando giras y promociones de un nuevo disco. No es que el grupo haya sido muy afectado”.
EL PODER DE LOS FANS
En el 2016, la industria del k-pop recaudó cerca de US$ 5 mil millones en el mundo. Su escena se mueve vertiginosamente y demanda lanzamientos múltiples a lo largo del año. La inactividad puede ser económicamente peligrosa. A pesar de todo, los fanáticos siempre apoyan a estos grupos.
“El tener grupos de fans poderosos logra que el artista pueda pasar etapas naturales como esta, se sigan desarrollando y la imagen no se vea mermada”, asegura Lourdes Arce, líder del club de fans de Army Perú del grupo BTS.
Un ejemplo del gran apoyo de los fanáticos es lo que pasó con G-Dragon de Big Bang. Su agencia YG Entertainment tuvo que pedirles que le dejen de enviar cartas. “Ha recibido tantas que se ha acabado la tinta y papel A4 en su batallón”, informaron. No dudamos que su regreso llegará con una gran explosión.
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